“Hoy vemos que por un lado se multiplican las quejas de los ciudadanos y por el otro hay un sistema que además de malo, está en constante cuestionamiento, por lo cual creemos que es urgente por parte del municipio implementar un nuevo sistema”, indicó el titular del bloque Volver a Rosario, que también integra la concejala Valeria Schvartz.
“En la ciudad funcionan dos sistemas. Uno es prestado por la empresa Tránsito Rosario SA, que es la misma que tiene la concesión del estacionamiento medido y a la que se le paga por acarreo. Esto implica que muchas veces se llevan un auto por estar pasado 20 centímetros en la línea amarilla, su accionar termina siendo absolutamente recaudatorio. El otro sistema es de contratos anuales con particulares que tienen una o más grúas a los que se les paga 1800 pesos por hora, acarreen o no vehículos. En este caso, a la grúa se tiene que subir un inspector de tránsito, que en definitiva es quien certifica las horas trabajadas. Analizando los costos, resulta que no es negocio para nadie poner a rodar un vehículo de esas características, por lo que se presume que, tal como lo dejó entrever la propia secretaria de Control y Convivencia, Carolina Labayru, dejan las grúas estacionadas y facturan horas no prestadas”, explicó Tessandori.
“Por todo esto, presentamos por un lado un pedido de informes sobre los contratos vigentes, las horas facturadas y la cantidad de acarreos por cada uno, porque vemos que el sistema viene funcionando mal y desde hace mucho tiempo. Y por otro, presentamos un proyecto de ordenanza para contar con un nuevo y unificado sistema en donde se pague por un servicio efectivamente prestado, con acarreos mínimos semanales, vehículos específicos y con un sistema de seguimiento satelital con recorridos preestablecidos”, agregó el concejal de Volver a Rosario.
“Nuestra labor es controlar y auditar la gestión municipal en cada uno de sus aspectos, pero además de la crítica siempre proponemos soluciones que garanticen transparencia y buenos servicios”, remarcó finalmente.