El ministro de Gobierno provincial respondía este lunes a la mañana, preguntas de los diputados santafesinos tras salir a la luz la supuesta aplicación de vacunas contra el coronavirus a funcionarios y dirigentes sindicales cuando, aparentemente, no les correspondía. Antes de ser interpelado, habló a la prensa
El ministro de Gobierno santafesino Roberto Sukerman es interpelado desde este lunes a las 10 por los diputados de la provincia tras la denuncia del supuesto “vacunatorio vip” en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria por la que se reveló la inoculación por fuera de calendario de funcionarios públicos y dirigentes sindicales. Antes de sentarse a responder unas 26 preguntas, dio una conferencia de prensa donde rechazó la existencia de privilegios a la hora de la aplicación de dosis y anticipó que serán «inflexibles» con quienes se hayan adelantado al turno que les correspondía.
Sukerman se encontraba de forma presencial junto con el presidente de la Cámara de Diputados Pablo Farías, mientras que el resto de los legisladores participaba de la interpelación de forma remota, según mostró el programa Cada Día (El Tres).
Según explicó el ministro antes de ingresar a la Legislatura, en contacto con la prensa, «la Provincia tiene sistemas de control», aunque no implica que «no haya errores o filtraciones de personas que quieran saltear la situación». «Quiero dejar en claro que no es una decisión política. No hay vacunatorios VIP. Puede haber alguna situación aislada. Todos los funcionarios que dependan de la provincia asumirán las consecuencias como el funcionario del cual hablamos (director del hospital Eva Perón)», agregó.
Además, recordó que en el momento en el que habría ocurrido la «vacunación VIP» denunciada fue «al principio de la campaña», donde algunos intendentes se inocularon para «ejemplificar que las vacunas eran buenas. Quiero recordar la frase de (Sonia) Martorano, que decía que teníamos vacunas pero no brazos por la campaña de desprestigio de la vacuna».
«En febrero, el Estado nacional amplió el personal estratégico. Estaban las personas mayores de edad con comorbilidades, se privilegió a docentes. En febrero se mencionó a otras personas estratégicas, donde podían caber funcionarios con funciones importantes. Algunos funcionarios o intendentes se vacunaron», comentó.
Sukerman remarcó que el gobierno será «inflexible» con quienes se saltearon el turno que les correspondía. «No hay una estructura política avalada por el gobernador o ministros para que esto suceda. Puede haber sido cualquier persona que haya facilitado la vacunación sin ninguna decisión política», concluyó.
La denuncia
El director de Enfermería del Eva Perón, Ariel Pérez, denunció que entre enero y marzo se inoculó personal político y gremial como trabajadores de la salud. En este marco, renunció el ex vicepresidente de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), Alberto Joaquín quien reconoció haberse vacunado por ser personal estratégico, de la misma manera se justificó el secretario general de Luz y Fuerza, Alberto Botto.