Santo Tomé amaneció sin servicios municipales debido a una asamblea permanente convocada por los trabajadores, en rechazo a la decisión del intendente Miguel Weiss Akerley de descontar el día a quienes adhirieron al paro nacional convocado por la CGT el jueves pasado.
Julio Sosa, dirigente del gremio Asteom, explicó que la medida cayó “muy mal” entre los trabajadores, ya que había un acuerdo previo con funcionarios del Ejecutivo para garantizar los servicios esenciales durante la jornada de protesta. “El paro no era contra Weiss Akerley ni contra Pullaro, era contra las políticas del presidente Milei”, remarcó.
Los trabajadores anunciaron que continuarán en asamblea permanente hasta ser recibidos por el intendente y que esperan una revisión urgente de la decisión que generó el conflicto. Mientras tanto, la ciudad permanece sin prestación de servicios municipales, afectando la recolección de residuos, mantenimiento urbano y otras áreas clave.