El presidente de la Corte Suprema, Rafael Gutiérrez, se plantó por primera vez frente al recambio de ministros del máximo tribunal que impulsa el Ejecutivo provincialy que ha generado tensión entre los Poderes. El magistrado pasó en limpió varios reproches y avisó que se irá sólo cuando él lo decida sin que nadie se lo imponga, en un claro mensaje al gobernador Maximiliano Pullaro.
La discusión sobre el recambio de ministros de la Corte se ha convertido no sólo en una disputa sino en un choque de poder entre pesos pesados. Gutiérrez, el cortesano de más años en el cargo, decidió hablar públicamente sobre la situación tras algunos hechos que generaron agitación en el Poder Judicial.
La cuestión de fondo parece ser el recambio de ministros. Ante la consulta sobre si él abandonará la Corte, ya que sobrepasa el límite de edad constitucional, Gutiérrez fue taxativo. “No, yo no. Me voy a ir el día que yo quiera, o sea, así como entré hace 50 años al tribunal, por la misma puerta que entré quiero salir, pero por decisión propia”, dijo al programa Trascendental, de LT8.
Corte y la jubilación
Los seis ministros (Roberto Falistocco, Eduardo Spuler, Mario Netri, María Angélica Gastaldi, Daniel Erbetta y Gutiérrez) pasaron la edad de retiro de 65 años que indica la Constitución provincial.
Es más: a excepción de Erbetta, quien tiene 70 años, el resto ya cumplió 75 -y hasta hay casos que superan los 80-, que es el límite de la Carta Magna nacional. Hasta ahora, solo Netri avisó que se retira.
¿Qué fundamentan para mantenerse en el cargo? El propio Gutiérrez lo dejó en claro en el discurso de apertura del año judicial. “La ley máxima de la provincia estipula expresamente las garantías de inamovilidad e intangibilidad de los magistrados en el ejercicio de sus funciones, en tanto conserven su idoneidad física, intelectual moral (artículo 88 de la Constitución Provincial)”, sostuvo. Pullaro estaba en primera fila. “La juventud va por dentro. Ese es el lema hoy”, indicó un vocero del Poder Judicial.
Las diferencias se encendieron en el último tiempo con el avance de la reforma previsional que impacientó al sector porque, entre las modificaciones, se estipularía un mayor aporte de los haberes altos, donde los del Poder Judicial se llevan todos los números. Pullaro avisó que “se terminaron los privilegios para los que tienen coronita” y todo estalló.
Pero también se acumulan en los enojos algunos avances del gobierno provincial que en la Justicia interpretan que rozan los límites de la institucionalidad y la independencia de Poderes. Uno de ellos es la gran cantidad de vacantes que se acumulan y el Ejecutivo no concursa, y el nuevo sistema de selección de magistrados y funcionarios del área.
Audiencia y reclamos
Por eso le pidieron una audiencia al gobernador, que aceptó y los recibirá formalmente este domingo, a las 7.30. Un día y horario bastante particular que sugiere un mensaje en sí mismo, fundamentado en la cargada agenda que ya tiene dispuesta para esta semana. La cita presume una confrontación directa, con los modos institucionales correspondientes, pero que probablemente inicien un camino de acuerdo o de más tensión, sin términos medios.
“Le vamos a plantear los problemas de funcionamiento. En primer lugar, las vacantes de jueces de las cinco circunscripciones (…) Asumieron el 10 diciembre y, salvo los de la Cámara de Ejecución Penal, totalmente conflictiva la designación, no han cubierto ningún cargo”, dijo Gutiérrez. Y proyectó que, si se sigue con este ritmo, a fin de año habrá 90 puestos sin cobertura.
Respecto de si observa una actitud de embestida sobre el Poder Judicial de la actual administración, dio a entender que sí. “Lo estoy viendo, no solo en Santa Fe sino en la Argentina. Miremos la medida de limitación del acceso a la información, o el presidente (Javier Milei) cuestionando todo porque están ensobrados, o les dice ratas a los legisladores. O el gobernador dice que vamos a jugar al golf, cuando ni se dónde queda una cancha de golf”, agregó.
Gutiérrez se refirió a que en el gobierno deslizaron con ironía que la foto del viernes pasado de más de 200 jueces, tomada en las escalinatas de tribunales y en señal de reclamo de las vacantes y el nuevo sistema de selección de magistrados, habían logrado que los magistrados “dejaran los palos de golf”. La chicana no cayó muy bien y el cartón se llenó cuando el gobernador afirmó que tienen “coronita”.
“Nosotros, que representamos a Poderes del Estado, tenemos que mantener un nivel institucional, compartamos o no con el otro. Pero dentro de una calidad institucional, como corresponde”, finalizó. La reunión del domingo a primera hora de la mañana seguramente tendrá reclamos de modos y de presupuesto. Y dará definiciones.
Fuente: La Capital