El gobernador Omar Perotti abrió este lunes el 141 período de sesiones ordinarias de la Legislatura santafesina. Crédito: Mauricio GarínEl gobernador Omar Perotti abrió este lunes el 141 período de sesiones ordinarias de la Legislatura santafesina. Crédito: Mauricio Garín
En términos institucionales, fue el cuarto mensaje a las cámaras del acto de apertura de las sesiones ordinarias; en clave política fue el último discurso de Omar Perotti en su gobierno.
A tan solo diez días para el cierre de las listas de precandidatos para competir en las primarias, fue inevitable el tono de despedida que marcó la jornada en la que de entrada el propio jefe de la Casa Gris dejó en claro que lo será hasta el último día de su mandato. “Gobernaré hasta el último día con orgullo y trabajo, en la misma proporción, con un férreo compromiso permanente con esta Provincia”, prometió en los primeros minutos.
Por como se organizó el calendario electoral y porque la Constitución fija al 1ro de Mayo como de inicio del año legislativo ordinario, el clima de armado de opciones electorales y definición de candidaturas se impuso al de un repaso desapasionado sobre cómo fue realmente el gobierno de Perotti o, al menos, por qué acciones, aciertos -o lo contrario-, será recordado.
Destinatarios
Los discursos de este tipo, los que conllevan el repaso general de la gestión, cuando está cerca la fecha de vencimiento de los mandatos, tienen como destinatarios inmediatos a los dirigentes políticos del propio espacio político y de la oposición. Pero también a la historia, a sus lecturas inmediatas y las que más adelante perduren.
El propio Perotti enumeró sus deseos, respecto de cómo le gustaría ser recordado en el futuro: “el Boleto Educativo Gratuito, la Billetera Santa Fe, las miles de obras estratégicas en marcha de infraestructura vial, acueductos, gasoductos, conectividad, ferrocarril, puertos, aeropuertos, las políticas sanitarias, educativas y de desarrollo tecnológico; las acciones concretas de apoyo al que invierte, produce y trabaja, fuerte proceso de descentralización y transferencia de recursos a los gobiernos locales” y aseguró que se trata de políticas públicas que “cierran brechas del pasado y abren puertas del futuro para toda la provincia”, en uno de los momentos en que buscó sostener su idea primitiva de 2019: “No vinimos a hacer lo mismo”.
Para el gobernador, que a partir del 10 de septiembre será el gobernador saliente, “cada una de estas iniciativas no son marketing político. Son acciones y dispositivos concretos. Hemos hecho y haremos más inauguraciones que anuncios. Somos un gobierno federal que no solo reclama a la Nación lo que es de Santa Fe, sino que trabajamos con el ejemplo”, subrayó.
Se apoyó en números y en gráficos. En una imágenes ilustrativas a la manera de los noticieros televisivos que trabajan mucho con el archivo más que con los cronistas en la calle y esperó demoler con cifras las críticas. Acaso le faltaron conceptos, algo un poco más profundo que una prolija planilla de Excel. Es lo que se espera de un dirigente político que completa su gestión al frente del gobierno santafesino. Su actitud en cambio frente a los adversarios políticos merece destacarse: comenzó en 2019 con términos muy duros y de confrontación y terminó con un llamado a la unidad para defender Santa Fe frente a los privilegios históricos de porteños y bonaerenses y para enfrentar al delito.
Productivista
El tema de la producción, tanto como acción de gobierno en la promoción como una de las fortalezas de la provincia, recorrió todo el discurso del gobernador. De cada obra pública de infraestructura destacó sus potencialidades para ampliar la actividad económica o para mejorar las condiciones de competitividad de las empresas santafesinas.
Los elogios los dirigió a las iniciativas de los privados y a las acciones que desde su gobierno buscaron darles mejores marcos para su acción. En ese sentido explicó la inyección que significó Billetera Santa Fe, el cuidado de las tarifas de la energía eléctrica y otras ayudas durante la dura cuarentena que impuso la pandemia, ante la sequía en las cadenas de valor del mundo de la actividad primaria, y respecto de todo el sector privado ante la inflación. La falta de lluvias y el descalabro de los precios se mencionan en cinco y seis oportunidades respectivamente en el discurso. Apenas un par de páginas de 120 se dedican al lamento de lo que significó para su gestión la crisis económica argentina y la pandemia. Sin embargo, en 17 ocasiones habrá una mención a los efectos del Covid-19 en Santa Fe.
En uno de ellas, se prolongaron los aplausos con más intensidad. Fue cuando elogió la respuesta comprometida de los equipos de salud durante lo peor del Coronavirus. En el subtítulo referido a Salud fue cuando más aplausos se escucharon y, curiosamente el primero llegó recién al minuto 50 al hablar de la inversión en acueductos y saneamiento. Partieron de una de las barras con algunos funcionarios provinciales de segundas líneas, a los que se sumó parte del recinto.
Una cita a Houssay
El capítulo que Omar Perotti dedicó a las políticas educativas y de promoción de la ciencia y la tecnología contiene párrafos de excelente factura, pero algo alejados de la realidad. O por lo menos así lo indican las quejas de los docentes sobre las trayectorias que facilitan que los alumnos del secundario puedan pasar de año con bastantes más facilidades. El gobernador le llamó a ese sistema donde lo difícil es repetir, un esquema de “avance continuo” y ponderó: “volver a hacer lo que se tenía aprobado es una sinrazón pedagógica que mina el ánimo y el deseo de seguir aprendiendo”.
“Se trata de un modelo muy parecido al que tendrán luego en la universidad, con distintos formatos, tutorías y mayores recursos humanos y tecnológicos para darles un acompañamiento en aquellas materias donde hubo dificultades. Pero al final del recorrido, hay que tener todo aprobado, como siempre. Medidas similares ya funcionan en otros países del mundo y también son evaluadas por distintas jurisdicciones de la Argentina”, dijo.
En cuanto al desarrollo científico y tecnológico advirtió que “Santa Fe no sólo es el corazón productivo del país. También queremos que sea el motor de la innovación” y llevó adelante la única cita textual de su discurso, recurrió a una frase del premio nobel de Medicina y Fisiología, Bernardo Houssay.
Es interesante, recién en 1998 el entonces presidente argentino Carlos Menem se ocupó de advertir que fue un error de Juan Domingo Pérón cuando no lo recibió ninguna autoridad del país al científico con la máxima distinción, en 1948. Ahora un gobernador peronista lo trae a su último discurso ante las Cámaras para sostener que la inversión en el conocimiento no es simplemente interesante, “es necesaria”, advirtió Perotti.
“La ciencia, la técnica y la investigación son la base de la salud, el bienestar y la riqueza de los pueblos modernos. Hay quienes creen que es un lujo o un entretenimiento interesante. Grave error, es una necesidad urgente, inmediata e ineludible. Los países ricos lo son porque dedican dinero al desarrollo científico tecnológico. Y los países pobres lo siguen siendo si no lo hacen. La ciencia no es cara, cara es la ignorancia”, citó de Houssay el gobernador. Y de su puño y letra agregó: “Este es nuestro norte de trabajo, esta visión es la que me ha llevado desde hace muchos años a bregar por mejores presupuestos para ciencia y tecnología a nivel nacional, para que los proyectos se federalicen y lleguen a la provincia de Santa Fe. Por eso quintuplicamos el presupuesto provincial en ciencia y tecnología como señal inequívoca de esta prioridad.
Autocrítica explícita ante la inseguridad
Perotti no esquivó, como en otros años, el tema de la seguridad. Sabía que allí no correspondían los aplausos y no los hubo más que para cuando se comprometió a firmar en pocos días el decreto para reglamentar y hacer operativa la ley de víctimas, que otorga más derechos en el proceso penal a los deudos de la creciente violencia en las calles o para las personas que sufrieron delitos, sobrevivieron y ahora esperan justicia.
Perotti subrayó que en cantidad de agentes y en la calidad de las herramientas a su disposición se hecho más fuerte a la policía, pero debió admitir que sigue siendo un objetivo permanente bajar la corrupción en la policía.
Hubo autocrítica explícita al hablar de ese tema espinoso y admitió que “hubo errores, no los negamos”.
“A lo largo de estos años, no nos movimos ni un sólo milímetro de nuestro compromiso de cortar vínculos con el delito, de romper con las relaciones entre el Estado y los delincuentes, de que no haya impunidad ni privilegios para nadie sin distinción”, expresó en un párrafo que pareció recordar aquel duro discurso de asunción en diciembre de 2019, pero que de inmediato quedó circunscripto al problema de la fuerza policial, sin más referencias a los dirigentes políticos que lo antecedieron como ocurriera casi cuatro años atrás.
Las vallas Vs la prensa
Mientras a lo largo de casi tres horas, el gobernador Omar Perotti subrayó que su gobierno no buscó mecanismos de censura para ocultar la realidad o negarla en el debate público, ante los sinsabores de su gestión, un elemento físico nuevamente se interpuso entre los periodistas y su deseo de brindar la mejor cobertura del acto: las vallas.
Por expresa indicación de la seguridad del gobernador Perotti, y pese a lo propuesto desde la organización del Senado, no se permitió a los periodistas, ni a los fotógrafos acceder al hall central para conversar y entrevistar a los legisladores, los invitados especiales, los funcionarios, y el propio gobernador.
En su lugar, hubo en el exterior, escalones abajo del frente del Palacio, un amplio corredor vallado a ambos lados para todas las autoridades de los tres poderes y, del otro lado, acorralados trabajaron como pudieron los cronistas.
Obviamente, nada parecido a la normalidad anterior a la pandemia. Históricamente, los cronistas parlamentarios y periodistas acreditados para el acto del 1ro de Mayo han podido transitar libremente por el hall central, mezclarse entre los participantes del acto y conversar ordenamente en medio de la salida del gobernador. Pero eso no se ha recuperado para la prensa, impera aún una suerte de distanciamiento nada sano.
Fuente: El Litoral