“En relación a lo ambiental, la impetuosa salida de la empresa, buscando cortar de un momento a otro el funcionamiento de la planta (sin tener en cuenta el peligro que esto conlleva) genera un riesgo ambiental alarmante. A esta hora pueden haber 200 toneladas de óxidos de propileno, producto muy inflamable controlado con atmósfera de nitrógeno. También, “Dowanol PM”, un producto inflamable, estimado en 50 toneladas. La empresa dejó la planta sin la guardia mínima de trabajadores capacitados para que esto no conlleve un riesgo para la población de la zona”. La impunidad de las multinacionales asusta, repitiendo la lógica de La Forestal, se llevan todo, cierran y queda el costo social y ambiental.
Fuente: CFIN