Mientras fuera del Congreso se sucedían los enfrentamientos entre barrabravas y militantes opositores con la Policía, un verdadero escándalo se produjo este miércoles dentro de la Cámara de Diputados con piñas, insultos y empujones entre los legisladores, que obligaron a levantar la sesión en la que se aprobó el emplazamiento a comisión de diez proyectos para que se investigue el caso de la criptomoneda $LIBRA que involucra a Javier Milei, pero fracasó el intento del kirchnerismo por avanzar con el juicio político.
La sesión de este miércoles, en la que el Gobierno consiguió postergar la comisión por el criptogate, comenzó con un clima de tensión por la decisión del oficialismo de querer bloquear la investigación por el escándalo del memecoin para blindar al Presidente. Pero lo que no esperaba el oficialismo era que el bloque de Unión por la Patria (UxP) avanzara con su idea de instalar el juicio político contra Milei y reavivó las tensiones por la presidencia de la comisión de Juicio Político.
Pese a que los K no tuvieron el apoyo para la propuesta de juicio político, la discusión comenzó justo después de que se aprobara por unanimidad la declaración de emergencia de Bahía Blanca cuando Germán Martínez, jefe de la bancada peronista, pidió que se vote la ratificación de las autoridades de la comisión de Juicio Político.
Frente a esa insistencia, Martín Menem quiso dilatar la discusión tratando de hacer tiempo para vaciar el recinto y hacer caer el debate mientras los libertarios, el PRO y el radicalismo dejaban sus bancas.
Pero las diputadas Rocío Bonacci y Marcela Pagano se quedaron en sus bancas a la espera de ratificar la presidencia de la periodista al frente de la comisión de Juicio Político. En tanto, el correntino Lisandro Almirón trataba de arrancar de su asiento a Oscar Zago, jefe del MID, que en la sesión dio la sorpresa colaborando con el quórum.
Zago se resistió a la apurada de Almirón y comenzó a revolear trompadas mientras lo empujaban para la salida. «La concha de tu madre», le gritó el jefe del MID al correntino que de ser uno de los adversarios de Menem pasó a ser uno de los aliados más fieles. En el medio de la pelea quedó el salteño Julio Moreno Ovalle, que recibió un golpe en el camino. En el ingreso al recinto Zago fue sujetado por Cristian Ritondo que lo retenía para que no dé quórum.
En medio del bochorno, Menem apeló a un cuarto intermedio y cuando se retomó la sesión, Victoria Tolosa Paz pidió un emplazamiento para que la comisión de Asuntos Constitucionales trate un pedido para suspender las facultades especiales otorgadas al Presidente a través de la Ley Bases.
Para esa instancia el recinto se había desmadrado. Las libertarias Celeste Ponce y Lilia Lemoine intimaron, por su parte, a Pagano y Bonacci por haberse quedado sentadas. La periodista desafió a Lemoine mostrándole el dedo del medio.
«Están dando quórum», le recriminó la cordobesa y la periodista que esperaba ser ratificada como titular de la comisión de Juicio Político le gritaba a Lemoine: «Qué te pasa forra». Bonacci, en tanto, le respondió a sus compañeras de bloque arrojándole un vaso de agua. «Bonacci cómo vas a tirar agua», le recriminó Ponce.
El escándalo era monumental y Martín Menem al ver que se había caído el quórum al pasar de 131 a 128 dio por caída la sesión. Eso disparó a los diputados de UxP, encabezados por Máximo Kirchner que se acercó al sector de la presidencia a los gritos seguido por Carlos Castagneto y Paula Penacca.
”Vos no podes ser presidente de la Cámara”, le dijo el jefe de La Cámpora furioso por la actitud del riojano que jugó con el momento justo para levantar la sesión.
Lo cierto es que Martín Menem miró a los diputados de la oposición y se retiró del recinto dando por caída la sesión y dejando solo al secretario parlamentario, Adrián Pagan, quien fue increpado por la tropa K, hasta le arrojaron un vaso de agua mientras trataba de contener a los diputados opositores.
Aún no está preciso el momento en que se levantó la sesión. Una versión indicaba que fue cuando el radical Fabio Quetglas se levantó de su asiento al ver que estaban en los 129, aunque otros indicaban que fue cuando Almirón levantó a Zago por la fuerza y generó la primera escaramuza.
Las discusiones continuaron en el recinto cuando el santafesino Eduardo Toniolli, del Movimiento Evita, quería pasar al sector que ocupaba el oficialismo, y Silvana Giudici, en medio, gritaba: «Llévatelo para allá», mientras evitaba que se cruzara con Ritondo. En un momento el jefe del PRO y el diputado de UxP estuvieron frente a a frente, hubo insultos y gritos, pero llegaron a ser separados antes de llegar a las manos.
Finalmente, Máximo Kirchner llevó un poco de calma al sacar a sus diputados del recinto en medio de las tensiones que existían en las mismas filas del oficialismo con Pagano, Bonacci y Zago, quienes fueron cuestionados por los libertarios al acompañar con el quórum.
Los K insistieron con el pedido de juicio político a Milei
Lo cierto es que las tensiones se iniciaron cuando el kirchnerismo apeló a un apartamiento del reglamento para pedir el emplazamiento de la comisión de Juicio Político para avanzar con tres proyectos que promueven el proceso de enjuiciamiento de Milei por el escándalo de la criptomoneda.
Paralelamente, Germán Martínez, presidente del bloque de Unión por la Patria, presentó una cuestión de privilegio para que sean ratificadas las autoridades de la comisión de Juicio Político, que el año pasado designó a Marcela Pagano como su titular. Pero la presidencia de la periodista no fue reconocida por Martín Menem, quien desconoció las designaciones argumentando que la reunión constitutiva había sido suspendida.
Por eso, Pagano y Oscar Zago, quien defendió desde un comienzo la elección de la periodista, se quedaron y dieron quórum con la intención de ratificar lo votado el año pasado. Menem había dejado para el final ese punto y, finalmente, no pudieron ser ratificadas por el escándalo en el recinto.
La propuesta de emplazar a la comisión para avanzar con el proceso de enjuiciamiento no prosperó porque se sabía que no tenía el consenso de las otras bancadas de la oposición. El kirchnerismo sólo contó con el acompañamiento de los socialistas Mónica Fein y Esteban Paulón, Natalia de la Sota, los 5 de la izquierda y el peronista Roberto Mirabella.
Durante el debate, Silvana Giudici, del PRO cuestionó el pedido de juicio político a Milei, apuntando que ninguna de las instancias judiciales han sido transitadas. «Hemos visto aberraciones y hasta desafueros de ministros que robaron, que estuvieron en la cárcel, y que el bloque de la ahora oposición ha negado en este mismo recinto”, señaló la legisladora, quien alertó sobre «un ánimo destituyente” del peronismo.
Mientras que Miguel Angel Pichetto, rechazó el pedido de juicio político al apunta que hay “un conjunto de etapas previas que son imprescindibles”, mientras que Juan Manuel López, de la Coalición Cívica, considero “prematuro” apelar a ese procedimiento. “Así como denunciamos al kirchnerismo, no le pedimos inmediatamente un juicio político, tardamos muchos años porque creemos en la institucionalidad y no nos queremos aprovechar de las desgracias o delitos», dijo.
Fuente: Clarin