Luego de que el Senado rechazara el mega DNU, el presidente Javier Milei se refirió al tratamiento en Diputados, donde espera su aprobación. Sin embargo, advirtió que “si se cae, volveremos a la carga con otros decretos hasta que las reformas se concreten”.
En esa línea, agregó: “El DNU devuelve libertades y avanza contra los vicios de la política. Ha sido una discusión positiva, tenemos capacidad de aglutinar voluntades”.
El Presidente aseguró que el rechazo en la Cámara alta del decreto 70/23 estaba contemplado: “Era altamente probable. Tenemos 7 senadores, por lo tanto, era un resultado esperable, pero, a pesar de eso, hay un aspecto positivo porque conseguimos 25 votos”.
“Se hizo un trabajo para sumar voluntades que se alineen con las ideas de cambio. De los orcos no puede uno esperar actitudes más que de orcos. Hay otros que prefieren defender los privilegios de casta sobre los intereses de los argentinos”, apuntó en una entrevista con LN+.
Con 42 votos en contra, 25 afirmativos y 4 abstenciones, el pasado jueves el proyecto se cayó y ahora deberá volver a Diputados. Fueron 33 senadores de Unión por la Patria, los radicales Martín Lousteau y Pablo Blanco, y los peronistas disidentes de Unidad Federal Edgardo Kueider y Carlos “Camau” Espínola, quienes llevaron atrás el proyecto.
En ese sentido, Milei insistió: “Tarde o temprano, la política va a tener que entender que se acabaron los privilegios. No estamos dispuestos a bajar los brazos. Estas son las primeras mil reformas. Cuando terminemos con estas, tenemos otras tres mil esperando”.
En otro tramo de la entrevista, el presidente habló sobre Victoria Villarruelen medio de las versiones de una tensa relación: “No estamos peleados. El video que hizo después de la votación es claro. Tenemos una excelente relación. No pensamos exactamente igual, pero nuestras diferencias son imperceptibles para el resto de la gente”.
Asimismo, descartó haber cuestionado la decisión de la vicepresidenta de convocar el tratamiento del DNU: “Yo no me metí en opinar sobre si correspondía o no”.
Sin embargo, luego de que se anunciara la sesión, la Oficina del Presidente lanzó un duro comunicado en el que acusaba a Villarruel de querer avanzar con una “agenda propia e inconsulta”.
“Tanto el tratamiento apresurado del DNU 70/23 como la iniciativa de promover una fórmula jubilatoria sin consenso violentan el espíritu de acuerdo promovido por el Presidente en su convocatoria al Pacto de Mayo. El potencial rechazo del DNU, que actualmente se encuentra próximo a una definición de la Corte Suprema de Justicia, conllevaría un grave retroceso en los derechos y necesidades del pueblo argentino”, remarcó el escrito.
En ese sentido, Milei intentó aclarar la situación y manifestó que “hubo una interpretación maliciosa del comunicado”.