Javier Milei juró a las 11.56 como Presidente de la Nación ante la Asamblea Legislativa reunida en el recinto de la Cámara de Diputados del Congreso nacional.
El juramento fue tomado por la vicepresidenta saliente Cristina Fernández de Kirchner, mientras en el recinto los asistentes coreaban “Libertad, libertad”.
El presidente saliente Alberto Fernández fue el encargado de entregarle los atributos presidenciales -la banda y el bastón- al nuevo mandatario Javier Milei.
Luego de ese paso, Fernández y Milei rubricaron el acta correspondiente junto a la Escribano General de la Nación.
Antes de ingresar a la Asamblea Legislativa, firmó el libro de honor del Congreso de la Nación con la arenga “Viva la Libertad, carajo”.
Acompañado por la saliente vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, Milei ingresó al Salón de Pasos Perdidos para firmar los libros de honor, tal como ocurre en cada recambio presidencial.
A su lado, la ahora flamante vicepresidenta, Victoria Villarruel, escribió en el otro libro: “Todo por Argentina, Victoria”.
Luego, Milei y Villarruel observaron el ejemplar original de la Constitución Nacional y pasaron al hemiciclo de la Cámara de Diputados para prestar juramento, como es de rigor, ante la Asamblea Legislativa.
La Asamblea Legislativa del Congreso Nacional había comenzado a deliberar a las 11.15. La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner abrió la reunión plenaria de diputados y senadores que se realiza en el recinto de sesiones de la Cámara baja, en una ceremonia que cuenta con invitados especiales, embajadores, representantes de la justicia y de las Fuerzas Armadas, entre otros.
Los palcos superiores fueron ocupados por familiares e invitados especiales y allí se pudo observar a los padres de Milei, y a su pareja Fátima Flores.
Al abrir la sesión, Fernández de Kirchner pidió al flamante titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, que realice el izamiento de la bandera nacional y luego llamó a conformar las comisiones de interior que recibirán a Milei en el Salón Azul, y de exterior que darán la bienvenida al presidente electo en la explanada que da sobre la avenida Entre Ríos.
Entre las delegaciones extranjeras, también se encuentran presentes el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, en una de las bandejas ubicadas al costado del Estado; el mandatario ucraniano, Volodimir Zelensky; el embajador de Estados Unidos, Marc Stanley; y el expresidente de Brasil Jair Bolsonaro, entre otros.
Asimismo, se ubicó en uno de los palcos la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado junto a sus dos hijas.
También se encuentran el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri; los gobernadores de Entre Ríos, Rogelio Frigerio; de Mendoza, Alfredo Cornejo; y de Buenos Aires, Axel Kicillof; el expresidente Eduardo Duhalde, representantes del Poder Judicial y miembros del cuerpo diplomático.
Entre los ministros designados están ubicados la canciller Diana Mondino; la ministra de Capital Humano, Sandra Pettvello, el de Interior, Guillermo Francos; y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, entre otros.
Asimismo, se ubicó en otro de los palcos Zulemita Menem, prima del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem.
Con 53 años, el líder libertario llegó a la primera magistratura luego de una meteórica carrera política que se inició tan sólo dos años atrás, cuando fue electo diputado nacional por la fuerza que creó, La Libertad Avanza (LLA).
Milei resultó el candidato más votado en las primarias de agosto con el 29,86% de los votos; luego en las elecciones de octubre quedó segundo con casi el 30% y en la segunda vuelta de noviembre se impuso con el 55% de los sufragios, 11 puntos arriba del candidato oficialista Sergio Massa.
Con un discurso centrado en el combate a la “casta”, de recorte fiscal y reforma del Estado simbolizado en la figura de la “motosierra” con la que hizo campaña electoral, Milei asumirá ante un Congreso en el que deberá buscar -desde el lunes mismo- construir mayorías que le permitan aprobar un paquete de leyes que considera fundamentales para su gestión, y para lo que llamará a sesiones extraordinarias durante el verano.
Una diferencia sustancial de la jornada será la ausencia de un mensaje a los legisladores reunidos en el Congreso: tras la jura, el Presidente saldrá a las escalinatas del edificio y desde allí pronunciará su primer discurso, ante lo que espera sea una multitud de seguidores.
Esta semana, Milei convocó a través de las redes sociales a la ciudadanía a asistir el domingo a las inmediaciones del Congreso nacional y solicitó a la gente que lleve una bandera argentina.
Respecto de los atributos, la sastrería militar tomó hace un par de semanas las medidas para la nueva banda presidencial y en los últimos días el orfebre Juan Carlos Pallarols entregó el bastón de mando a la oficina de ceremonial de la Casa de Gobierno.
Terminado el capítulo del Congreso, Milei se trasladará a la Casa de Gobierno en un auto descapotable a lo largo de la avenida de Mayo y recuperará una tradición que no se repite desde la asunción de Fernando de la Rúa.
El “Cadillac de Perón” -que se asocia erróneamente a Eva Perón por la película de Juan Carlos Desanzo- se encuentra en exhibición en el Museo del Bicentenario pero no está operativo y por esa razón Milei no lo utilizará, tal como se especuló en los últimos días, y viajará en un Valiant 3 gris.
Así conseguirá la misma postal que Raúl Alfonsín, Carlos Menem y De la Rúa, viajando a contramano por la avenida de Mayo recibiendo el apoyo de sus seguidores.
El líder libertario “quiere caminar” en algún tramo pero, por ahora, se impone el criterio de la Casa Militar y de los expertos en seguridad que desalientan esa posibilidad.