El vocero presidencial, Manuel Adorni, dijo este jueves que los detalles del nuevo esquema de tarifas y quita de subsidios se conocerá en enero próximo, y aseguró que “el que siga necesitando el subsidio lo va a seguir teniendo”.
“A partir de enero va a estar el nuevo esquema de tarifas; por un lado lo que anunció el ministro (Luis) Caputo en su momento, que es esto de eliminar subsidios en torno al tercio por año; y además este esquema de ir progresivamente quitando el subsidio a la oferta y tendiendo a que se transforme en subsidio a la demanda”, dijo Adorni en su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada.
Al respecto, sostuvo que “el que siga necesitando el subsidio lo va a seguir teniendo pero lo que no queremos es que el que no necesite el subsidio, como puedo ser yo, no veo que alguien deba pagarme a mi el subsidio por viajar en colectivo, porque yo puedo pagar la tarifa completa”.
“En enero vamos a conocer los detalles, en el medio debe haber audiencias públicas, hay un proceso que vamos a respetar”, concluyó el tuitero devenido en funcionario.
Además, el vocero se refirió al proyecto de Ley Ómnibus que envió el Poder Ejecutivo al Congreso: “El Presidente envió al Congreso la Ley de Bases y Puntos de partida para la Libertad de los Argentinos, que es el resumen de la visión que como gobierno tenemos de la República Argentina”.
“Queremos un país que tenga un Estado limitado, que gaste poco y que solo se financie con impuestos bajos, ni con emisión ni con deuda. Un Estado que deje de molestar a sus ciudadanos y los deje contratar, producir, comerciar, exportar e importar como mejor lo crean”, afirmó.
Y explicó: “La Ley se enmarca dentro de la peor herencia recibida por un gobierno en la historia argentina, con 15 puntos de déficit fiscal entre el Tesoro Nacional y el Banco Central, precios reprimidos en prácticamente toda la economía, un Banco Central sin reservas, un Estado sin confianza, sin crédito y atravesando una inflación en torno al 1% diario, lo que nos encuadra en un proceso hiperinflacionario, y estamos tratando de evitar el peor de los desenlaces”.
“Además tenemos indicadores que asustan en materia educativa, social, de seguridad y en nuestro esquema de salud. Nadie puede dudar de que efectivamente Argentina atraviesa una situación de extrema emergencia. Nuestro gobierno tiene dos tareas fundamentales: evitar la catástrofe y corregir este rumbo decadente en el que está inmerso la Argentina”, cerró.