Este 20 de marzo se cumplen cinco años del inicio de la pandemia en Argentina. En marzo de 2020 el gobierno de Alberto Fernández tomó como acción preventiva el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO). Ordenó a todo el país que se mantuvieran resguardados en sus casas y, ese día, la vida de muchas personas dio un giro rotundo.
El 20 de marzo del 2020 el Gobierno nacional decretó el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (Aspo) para contener el avance del Covid-19. La cuarentena que sorprendió totalmente a todos, fue dictaminada por quien en ese entonces era el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García.
El objetivo era contener el avance del virus y preparar el sistema de salud con las herramientas necesarias para poder asistir a posibles pacientes. En un principio y según lo establecido en el decreto 297/20, el aislamiento iba a durar solo hasta el 31 de marzo, luego se extendió.
Las calles estaban desiertas, el ruido afuera era mínimo y en las casas las familias estuvieron más unidas que nunca, pero en los hospitales la situación era más caótica y había temor en aquellas personas que tenían algún allegado internado.
El anuncio del Gobierno por el Covid 19 en Argentina
En cadena nacional y por Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), Alberto Fernández aquel año declaró que a partir de las 00 del 20 de marzo, todos los argentinos debían «someterse» a aislamiento social. «Esto quiere decir que, a partir de ese momento, nadie puede moverse de su residencia, todos tienen que quedarse en sus casas. Es hora de que comprendamos que estamos cuidando de la salud de los argentinos», expresó el expresidente.
Durante su declaración lo acompañó el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Larreta; el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales y el santafesino, Omar Perotti.

Fernández informó la situación mientras mostraba imágenes de hospitales colapsados en Italia y aseguró que estaban tomando «el toro por las astas». «Nos hemos abocado a dar respuestas rápidas, aprovechando que Dios nos dio una oportunidad, que es darnos tiempo para poder prevenir el avance del virus», agregó.
A partir de las 00.00 horas, Prefectura, Gendarmería, la Policía Federal y los policías provinciales se apostaron en las calles para controlar la circulación de personas. «Aquel que no pueda explicar lo que está haciendo en la calle se verá sometido, a las sanciones que el Código Penal prevé para quienes violan las normas que la autoridad sanitaria dispone, para frenar una epidemia o – en este caso – una pandemia», manifestó.
Hasta ese momento en Argentina, según lo informado en Infobae, había 128 casos confirmados de los cuales 3 habían muerto. Más tarde las cifras, preocupantemente, fueron aumentando hasta llegar a las 130 mil vidas en todo el país.