Derek Chauvin ya había sido declarado culpable por un jurado. Este viernes, un tribunal estableció la pena.
El ex policía Derek Chauvin fue condenado a 22 años y medio de cárcel por el asesinato del afroamericano George Floyd, ocurrido en mayo de 2020 en Minesota, Estados Unidos.
Chauvin ya había sido declarado culpable pero aún no habían dictado la pena en su contra. El fallo fue informado este viernes por el juez Peter Cahill.
Los fiscales habían solicitado 30 años de prisión, mientras que su defensa había pedido la libertad condicional. La máxima sentencia permitida por ley, en base a los cargos imputados, era de 40 años.
Con buena conducta, Chauvin, de 45 años, podría salir en libertad condicional tras cumplir dos tercios de su condena, es decir, unos 15 años.
Durante los últimos meses el expolicía ha estado en confinamiento solitario por su propia seguridad en la cárcel Minnesota Correctional Facility-Oak Park Heights, a las afueras de Mineápolis.
Horas antes de su sentencia, los abogados de Chauvin presentaron una moción para que se celebre un nuevo juicio, que fue rechazada este jueves por el juez Cahill.
El magistrado consideró que la defensa de Chauvin no pudo demostrar que la corte «abusó de su discreción o cometió errores de tal manera que el acusado fuera privado de su derecho constitucional a un derecho justo», como había argumentado en la moción.
La reacción de los hermanos
Terrence Floyd, uno de los hermanos de George, interpeló a Chauvin durante la audiencia de este viernes, y le preguntó al exagente, sentado en el banquillo, sobre qué pasaba por su cabeza cuando presionó la rodilla sobre el cuello de su hermano.
«Mi hermano fue asesinado por Derek Chauvin, lo que todo el mundo sabe. Los hechos en este caso lo han demostrado más allá de las dudas razonables. Hay tres veredictos de culpabilidad», recordó.
Varios familiares de Floyd intervinieron en la audiencia de este viernes, en la previa de que se conociera la sentencia contra el ex policía.
Abrió la sesión Gianna, la hija de 7 años del fallecido, quien a través de un video mostrado en la sala dijo que le gustaría que su padre estuviera aquí pero que en realidad lo estaba «a través de su alma».
Y recordó cómo le cepillaba los dientes. «Si estuviera aquí le diría que lo quiero», indicó la menor, preguntada por otra persona en la grabación.
Otro de los hermanos de Floyd, Philonise, afirmó que había acudido este viernes al juzgado para pedir que se dé la máxima sentencia a Chauvin para cerrar la tragedia por la que ha pasado su familia.
Todos coincidieron en solicitar la pena máxima, pedido que finalmente no fue alcanzado con la condena informada por el tribunal.
Minutos después de la sentencia, Bridgett Floyd, hermana de George y fundadora de la George Floyd Memorial Foundation, elogió la decisión del juez Peter Cahill pero dijo que no es suficiente.
«La sentencia dictada hoy al oficial de policía de Minneapolis que mató a mi hermano George Floyd muestra que los asuntos de brutalidad policial finalmente se están tomando en serio», dijo.
Pero agregó que de todas maneras hay «un largo camino por recorrer y muchos cambios que hacer antes de que las personas de raza negra y morena finalmente sientan que las fuerzas del orden público de este país los tratan de manera justa y humana».
Para Biden, la condena es «apropiada»
Al presidente estadounidense, Joe Biden, le preguntaron por la condena a Chauvin y después de advertir que no conocía «todas las circunstancias que se tuvieron en cuenta» destacó que «parece ser apropiada».
El mandatario se pronunció así en declaraciones a periodistas durante una reunión en el Despacho Oval con el presidente de Afganistán, Ashraf Ghani.
El asesinato
El 25 de mayo de 2020, Chauvin y tres colegas arrestaron a Floyd, de 46 años, bajo la sospecha de que había pasado un billete falso de 20 dólares en una comercio de Minneapolis, ciudad del norte de Estados Unidos.
Floyd fue esposado e inmovilizado contra el pavimento en medio de la calle. Luego, Chauvin se arrodilló sobre su cuello durante casi diez minutos, indiferente a las súplicas del detenido, que le decía «no puedo respirar», y de los testigos.
La escena, filmada con un celular y subida a las redes por una joven, rápidamente se volvió viral.
Después de semanas de confinamiento domiciliario por la pandemia del coronavirus, cientos de miles de personas salieron a las calles en todo el país y en otros países, para exigir el fin del racismo sistémico y la brutalidad policial en Estados Unidos.
A las masivas manifestaciones se sumó el debate en torno a los problemas sociales urgentes que afectan a Estados Unidos, donde el presidente Joe Biden intenta emprender las reformas policiales que prometió durante su campaña.
El juicio de Chauvin, quien se negó a testificar, fue seguido de cerca por millones en todo el país.
El abogado del ex agente, Eric Nelson, aseguró que su cliente había seguido los procedimientos policiales vigentes en ese momento y que la muerte de Floyd se debió a problemas de salud agravados por el consumo de drogas.
Los miembros del jurado no quedaron convencidos y tardaron menos de diez horas en declararlo culpable.