El presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, indicó este miércoles que va a “reflexionar” sobre su permanencia en el cargo y que comunicará su decisión el próximo lunes, luego de que la Justicia anunciara una investigación contra su esposa, Begoña Gómez, por presunta “corrupción”.
Sánchez comunicó esta decisión en una carta a la ciudadanía que publicó a través de la red social X después de que un juzgado de Madrid haya abierto diligencias de investigación contra Gómez.
La investigación es por la supuesta comisión de delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios tras la denuncia de Manos Limpias, un polémico sindicato que alguna vez fue también acusado, según la información del sitio DW.
El jefe del Ejecutivo español lamentó el ataque “sin precedentes” contra su esposa y se preguntó si merece la pena seguir soportando esta situación.
“Me insto a responderme a la pregunta de si merece la pena, pese al fango en el que la derecha y la ultraderecha pretenden convertir la política. Si debo continuar al frente del Gobierno o renunciar a este alto honor”, añade Sánchez.
A continuación, añadió: “Necesito parar y reflexionar” acerca de “si debo continuar al frente del gobierno o renunciar a este alto honor”, señaló el mandatario en su carta, en la que agregó que dará a conocer su decisión “el próximo lunes, 29 de abril”.
“Acusación popular”
Manos Limpias utiliza un instrumento jurídico español único conocido como “acusación popular” para presentar denuncias penales contra terceros.
Los jueces pueden decidir si dan curso o no a tales denuncias y no todas las acusaciones han dado lugar a una investigación judicial.
Sin embargo, algunas sí lo han hecho: las acusaciones de Manos Limpias contra la infanta Cristina, hija menor del rey Juan Carlos, condujeron a su procesamiento por complicidad en fraude fiscal. Su marido fue condenado por fraude y evasión fiscal, pero ella fue absuelta.
A principios de este mes, una querella contra Sánchez por la ley que amnistía a los políticos catalanes por el impulso independentista de la región no fue admitida por el Tribunal Supremo.
“Utilizan una denuncia falsa de una organización ultraderechista para difamar y para injuriar a la presidencia del Gobierno”, dijo a la prensa la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, mientras que el principal partido de la oposición, el Partido Popular, pidió explicaciones a Sánchez.