s la donación más grande de Estados Unidos a un país de América latina hasta el momento.
Luego de meses de gestiones, Estados Unidos enviará hoy 3,5 millones de dosis de vacunas Moderna para la Argentina, la mayor donación del gobierno de Joe Biden a un país de América latina hasta el momento.
Hoy, dos vuelos de Aerolíneas Argentinas partirán desde Memphis, Tennessee, con las dosis de la vacuna de Moderna hacia el aeropuerto de Ezeiza, tal como anticipó LA NACION. Las vacunas, que se obtuvieron a través de un convenio bilateral, llegarán mañana.
La primera entrega de vacunas del gobierno de Biden se concretó recién después de un giro decisivo: la aprobación parlamentaria del Decreto de Necesidad y Urgencia del Presidente Alberto Fernández que modificó la legislación del país para poder cerrar acuerdos con los laboratorios de Estados Unidos. Luego de la firma del decreto, el Gobierno firmó el primer contrato de compra con Moderna, que enviará otras 20 millones de dosis durante el primer trimestre del año próximo. El gobierno de Biden despachó la donación luego de ese acuerdo.
“Como dijo el presidente, Estados Unidos será el arsenal de vacunas en nuestra lucha contra el COVID-19. Estamos orgullosos de poder entregar estas vacunas seguras y efectivas a la gente de Argentina”, anticipó un funcionario de la Casa Blanca. “Compartimos estas dosis para no obtener favores ni obtener concesiones. Nuestras vacunas no vienen con condiciones. Lo hacemos con el objetivo singular de salvar vidas”, agregó.
A diferencia de lo que ocurrió con la llegada de otras vacunas, el Gobierno dejó esta vez el anticipo de la donación en manos del gobierno de Estados Unidos por pedido de la Casa Blanca. Las gestiones quedaron en manos de la ministra de Salud, Carla Vizzotti, y el embajador argentino en Washington, Jorge Argüello. El anuncio oficial llegó de la embajada de Estados Unidos en Buenos Aires.
“Estados Unidos y Argentina están trabajando juntos como socios para luchar contra esta pandemia global”, dijo MaryKay Carlson, Encargada de Negocios de la Embajada de Estados Unidos en la Argentina en un comunicado. “Estamos orgullosos de poder entregar estas vacunas, de reconocida seguridad y efectividad, al pueblo argentino. Este es un momento único en la historia y requiere liderazgo y trabajo en conjunto”, agregó.
El arribo de las primeras dosis de una vacuna norteamericana llega luego de que la Argentina superó la barrera de los 100.000 muertos por la pandemia del coronavirus, y el Gobierno impuso una fuerte restricción a los viajes internacionales en un intento por contener el avance de la variante Delta del virus, mucho más contagiosa que la cepa original.
Además de la Argentina, 14 países de la región han recibido ya más de 18 millones de dosis de vacunas donadas por la Casa Blanca como parte del esfuerzo que desplegó el gobierno de Biden para doblegar la pandemia, con entregas que oscilaron entre 500.000 y más tres millones de dosis: México, Canadá, Colombia, Perú, Paraguay, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Brasil, Honduras, El Salvador, Haití, Guatemala y Costa Rica. Brasil había recibido el envío más grande hasta ahora: tres millones de dosis de la vacuna monodosis de Johnson & Johnson.
El envío del gobierno de Joe Biden a la Argentina es el más alto de todos los que fueron anunciadas para América. La Argentina es el 15º país en la región que recibe una donación de vacunas por parte de Estados Unidos.
La vacuna
Moderna desarrolló su vacuna junto con científicos del Instituto Nacional de la Salud (NIH, según sus siglas en inglés), y gracias a un respaldo del gobierno federal de más de dos mil millones de dólares a través de la Operación Warp Speed que implementó Donald Trump. La vacuna se aplica en dos dosis con una diferencia de 28 días. Al igual que la vacuna de Pfizer-BioNTech, fue diseñada con el método ARN mensajero, o ARNm. Los estudios clínicos arrojaron una efectividad del 94% para prevenir Covid-19 dos semanas después de la segunda dosis.
En Estados Unidos, el gobierno federal autorizó el uso de emergencia para la vacuna Moderna para los adultos, pero aún debe aprobarla para los menores de 18 años. Moderna dijo en mayo que su vacuna es un 100% efectiva para proteger a los adolescentes dos semanas después de recibir la segunda dosis según un estudio de más de 3700 personas de 12 a 17 años, y un 93% luego de la primera dosis.
Moderna ya pidió autorización al gobierno norteamericano para aplicar su vacuna a los adolescentes. En la Argentina, la vacuna aún debe ser autorizada además por la Anmat.
El gobierno de Joe Biden había dejado en claro al anticipar la donación que los países debían tener aprobado el marco legal y regulatorio apropiado para cada vacuna. Al principio, el Gobierno confiaba en recibir dosis de AstraZeneca, que también se produce en Estados Unidos. Pero la Casa Blanca decidió este mes que por el momento solo donaría las tres vacunas totalmente aprobadas en el país. Luego de que el Gobierno modificó todo el andamiaje legal a partir del decreto de Alberto Fernández, la donación finalmente se concretó.
La llegada de la vacuna Moderna permitirá reforzar la campaña de vacunación local, que marcha rezagada respecto de otros países del continente. Si bien la Argentina ya vacunó con una dosis a casi la mitad de la población –más que Brasil, México o Colombia en la región–, apenas el 11% ya completó el tratamiento, muy por debajo de los países desarrollados que acapararon las vacunas, pero también por detrás de Brasil, México o Colombia. Los dos países más avanzados en la región son Uruguay y Chile.
El Gobierno mantiene negociaciones con los otros dos laboratorios norteamericanos, Pfizer y Johnson & Johnson. La vacuna de Pfizer si ha sido aprobada para uso pediátrico, mientras que la vacuna de Johnson –también conocida por el nombre de la subsidiaria belga que la creó, Janssen–, es más barata, más fácil de transportar, y solo requiere una dosis.