Franceses y argentinos jamás olvidarán lo que ocurrió en el minuto 122 de la final del Mundial de Qatar cuando Kolo Muani quedó cara a cara con Emiliano Dibu Martínez y no pudo darle el gol al seleccionado europeo que hubiese sentenciado el duelo en favor de los galos. A más de un mes de aquel empate 3 a 3 que terminó con la coronación de la Albiceleste en los penales, el delantero recordó la jugada que marcó ese encuentro y, seguramente, toda su vida.
El joven de 24 que se destaca en el Eintracht Frankfurt de Alemania brindó una entrevista a la cadena Bein Sports y se vio obligado a rememorar el mano a mano que el arquero argentino le tapó en la final: “Todavía veo la jugada, la conozco de memoria. En mi cabeza me decía ‘tengo que rematar’. Intento el remate al primer palo pero el arquero hace una gran parada… y yo perdí ese duelo”.
Su gol hubiese significado el 4-3 en el minuto 122 y, por ende, la coronación de Francia en Qatar. Por eso la jugada sigue siendo viral y los fanáticos la analizan día a día. Es así que en las redes sociales hay quienes sostienen que el error de Kolo Muani fue haber pateado al arco, ya que si tocaba el balón hacia el centro del área, Kylian Mbappé podría haber definido sin ninguna resistencia. “Creo que podría haber buscado otras soluciones, picarla o encontrar a Kylian (Mbappé) porque estaba en un buen ángulo, pero en el momento no lo veo, porque la pelota llega y yo voy enfocado en el arco, no lo veo a Kylian. Es después, al ver la jugada, que te das cuenta de las otras opciones. Pero ya es tarde, no puedes hacer nada”.
La jugada marcó la final entre Argentina y Francia y el delantero reconoció que tendrá que aprender a convivir con su yerro: “Lo tendré en la garganta de por vida… para toda la vida. No me tortura ver esa jugada, solo me digo que tengo que seguir luchando. Marcar goles es lo que siempre busco para superarme. Seguro que este gol fallido me dará fuerzas para el futuro”.
En enero, el futbolista de 24 años que se destaca en la Bundesliga había hablado con la cadena Sky Alemania y también había recordado aquella acción que cambió el destino de ambas selecciones: “Pensaré en esta oportunidad por el resto de mi vida. Se convertirá en parte de mí. Debo seguir con mi vida. Todos los delanteros han fallado oportunidades en su vida. No puedo bajar la cabeza. Tengo que seguir así y seguir luchando”, comentó.
La atajada de Dibu Martínez quedará en la historia, porque quedaban apenas segundos para el final del partido, pero lo cierto es que Kolo Muani siguió concentrado en el juego y en la tanda de penales, cuando le tocó patear, pudo convertir y demostró una gran fortaleza mental. Pese a su tanto, el joven artillero no pudo cambiar la historia y la Argentina se alzó con el título y sumó su tercera estrella en su escudo.