Central no hizo un gran partido en Santiago, pero los errores que cometió los subsanó con goles. Fue 4-2 sobre Central Córdoba.
Otra vez una lluvia de goles, pero esta vez con algunos en contra, que fueron producto de los errores que cometió Central en Santiago del Estero, pero que contaron con el aval de la eficacia en el arco de enfrente. No fue bueno en líneas generales lo que hizo el equipo del Kily, pero quién le quita lo bailado a este equipo que logró su segunda victoria consecutiva, que respira más aliviado y se acomoda de a poco en este nuevo sueño de pelear más arriba.
La efectividad, otra vez uno de los principales atributos de Central, al menos en el primer tiempo, porque pese a que no tuvo demasiadas situaciones y que as pocas que hubo fueron espaciadas, el equipo del Kily hizo alarde de esa eficacia. Claro, esta vez, a diferencia de lo que fue hace algunos días contra Arsenal, el partido se le presentó mucho más complejo, enredado y con distracciones de una magnitud tal que pusieron a Fatura Broun en aprietos en más de una ocasión.
En realidad Central nunca se sintió cómodo, porque su control del juego no era sólido y el retroceso cada vez que perdía el balón, endeble. Así fue como Argañaraz (tuvo la primera a los 13’, con un remate que Fatura contuvo) comenzó a tornarse un dolor de cabeza para la última línea. Ojeda no paraba a nadie, Zabala y el Pupi iban pero volvían poco y cada pérdida era un dolor de cabeza. Por eso el Kily lo vivía con incomodidad.
El primero en atreverse en serio en Central fue el Pupi Ferreyra con un remate que Rigamonti envió al córner y de allí nació la primera estocada. El córner pasado fue capturado allá lejos por Covea, que después de un buen enganche le metió la rosca perfecta y la dirección precisa para que Avila, libre de marcas en el segundo palo, marcara de cabeza.
Pero hasta ahí eran más jugadas que juego de parte de un Central que se seguí equivocando y defendiendo mal. Uno de los yerros más graves fue cuando Avila la bajó de pecho y cuando quiso salir jugando se la puso en los pies a Giménez, que corrió hasta dentro del área y remató. Otra vez tapó Boun. Pero había un acto más en eso de la eficacia del canalla. Pelota para Zabala, Gamba le marcó el pase por afuera, hacia allí fue la pelota y el mendocino se internó en el área para sacar un centro preciso que Ruben conecto desde el piso, con la marca encima.
Resultadazo hasta ese momento, que pudo aumentarse si Maciel no bajaba al Pupi Ferreyra en el borde del área, pero que también pudo haberse complicado si Giménez o Argañaraz hubieran llegado a conectar el centro desde la izquierda.
Central pudo resolverlo rápido con ese remate de Gamba, al minuto del complemento, que Rigamonti tapó con el pie derecho, pero no sólo no fue, sino que el canalla se expuso al golpe por golpe, pero defendiendo siempre mal. Ahí fue cuando el ferroviario le copó el terreno, lo atropelló y lo puso contra las cuerdas. Broun se la tapó primer de cabeza a Lattanzio (en el rebote Almada la sacó sobre la línea), pero Fatura no pudo en la próxima, cuando el remate de Lattanzio lo contuvo a medias, para que Giménez sólo tuviera que empujarla. Desconcierto del lado de Central, que ingresó en un proceso de aturdimiento absoluto. Coleoni mandó a la cancha al lungo Ribas y el Kily respondió con el ingreso del Fosa Ferreyra.
Pero llegó ese minuto de enorme a alivio para Central. Patadón de Maciel sobre Gamba, segunda amarilla y roja, y de ese tiro libre el tiro libre de blanco que Almada impactó de cabeza para ponerla en el ángulo.
Ahí todo pareció cosa juzgada y de derecho así fue. Porque a Central Córdoba no le quedó resto físico ni futbolístico y a Central sólo dejar transcurrir los minutos administrando con criterio y sin cometer equivocaciones, que aparecieron. De hecho Ribas pudo definir en soledad para ponerle pimienta a un final otra vez apretado.
Un par de sofocones y el cierre holgado luego de que Ruben la empujara debajo del arco (Avila de cabeza al travesaño y el Fosa Ferreyra para Marco). Ahí sí Central se sintió ganador en una tarde que hizo cosas malas, pero que pagó todos esos errores con cuatro goles, otra vez. Sufrido el triunfo canalla en Santiago, pero triunfo al fin.
Síntesis
2 Central Córdoba (SE): César Rigamonti A; Gonzalo Bettini (83′ Juan Cruz González), Alejandro Maciel A A E Oscar Salomón y Jonathan Bay; Lucas Brochero (45′ Carlo Lattanzio A), Jesús Soraire (83′ LAutaro ), Cristian Vega (40′ Mateo Montenegro) y Alejandro Martínez; Abel Argañaraz A (65′ Sebastián Ribas) y Milton Giménez.
DT: Gustavo Coleoni
4 Rosario Central: Jorge Broun; Damián Martínez (79′ Fernando Torrent), Facundo Almada, Gastón Ávila A y Lautaro Blanco; Diego Zabala, Emmanuel Ojeda, Michael Covea (66′ Nicolás Ferreyra) y Luciano Ferreyra (92′ Francesco Lo Celso); Lucas Gamba (79′ Milton Caraglio) y Marco Ruben.
DT: Cristian González.