La hija de Ricky falleció de cáncer hace algunas horas en una clínica en Miami, luego de haber conocido a su hijo Félix.
Sofía Sarkany, hija del famoso zapatero Ricky Sarkany, murió hace algunas horas en una clínica en Miami, Estados Unidos. Estaba internada luchando contra un cáncer de útero que se agravó muchísimo en los últimos días. “Sofi“, como la llamaban en su familia y en el mundo de la moda que la adoraba por su simpatía y su humildad, había sido mamá hace exactamente una semana, a través del una subrogación de vientre.
Su hijo, producto de su amor con su pareja, Tomás Allende, fue presentado en sociedad en las redes sociales por sus abuelos Ricky y Grace. “¡Y llegó Félix lleno de vida hermoso y fuerte! ¡Para traer alegría y amor a toda esta familia que tanto lo esperaba! ¡Bienvenido, te queremos chiquitito!“, escribió la mamá de Sofía felicitando a los papás. El empresario además detalló: “Nació a las 12:41 y pesó 3.245 kg”.
Incluso Eugenia, ‘la China’ Suárez, gran amiga de la joven, le dedicó con una foto de las dos sonrientes y abrazadísimas. “Hoy se convirtió en mamá una de mis personas favoritas en el mundo: Sofi Sarkany. Félix, no veo la hora de conocerte y apretujarte. Amiga bienvenida a esta nueva etapa de amor y entrega. Vas a ser la mejor“, escribió la actriz, que además protagonizó varias campañas para la marca familiar.
Sofía era la hija mayor de Ricky Sarkany, uno de los nombres más destacados y queridos de la moda argentina, quien además es papá de Clara, Violeta y Josefina. Tenía 31 años y, al igual que el zapatero, se dedicó a la moda luego de haber estudiado arte en la Asociación de Amigos del Museo Nacional de Bellas Artes y obtener el título de Licenciatura en Diseño Gráfico. También había cursado en la prestigiosa escuela londinense de arte y moda Saint Martin, de donde egresaron John Galliano y otros grandes nombres de la pasarela.
A los 18 años empezó a trabajar en la empresa familiar: primero hizo una colección cápsula de zapatos con su nombre que tuvo tanto éxito que fue creciendo temporada tras temporada. Luego de unos años, se lanzó con la marca que lleva su nombre, siempre apoyada de cerca por papá Ricky, un hombre que siempre expresó un profundo amor por sus cuatro hijas y su mujer. La marca tiene un local en el Paseo Alcorta, en el mismo piso que Sarkany.
En el 2018, a la joven le detectaron un cáncer de útero (por esta razón había subrogado un vientre). El cuadro se complicó en los últimos días cuando entró en coma. Allegados de la familia comentaron que antes de entrar a terapia intensiva le dijo a sus padres: “Fui muy feliz“. La moda está de luto.