Elián Valenzuela, más conocido como L-Gante, enfrenta una decisiva jornada este lunes en el Tribunal Oral de Mercedes, donde ya se conoció la sentencia en el juicio que se le sigue por el delito de “privación ilegítima de la libertad agravada por el uso de armas de fuego”.
Este proceso captó la atención pública desde que se dio a conocer que el fiscal del caso, Adrián Landini, pidió para el cantante una condena de siete años de prisión. Los cargos surgieron luego de una denuncia impulsada por vecinos de General Rodríguez, y el cantante llegó a estar casi 100 días en detención preventiva por estos hechos.
En el proceso judicial, la parte querellante, que incluye a los abogados Darío Gastón Torres y Rosa Passi junto a otros demandantes, solicitaron una condena de ocho años para Valenzuela y tres años adicionales para quienes lo acompañaban. Luciano Locatelli, abogado de L-Gante, sostuvo su inocencia y busca la absolución, planteando que la privación de la libertad fue circunstancial y no constituye un acto intencionado.
La Justicia definió el futuro de L-Gante
El cantante se presentó al Tribunal 20 minutos tarde de lo esperado donde escuchó la condena. La Justicia lo absolvió por el cargo de “privación ilegítima de la libertad”, el cual era el más grave de los cargos que tenía en su contra. Sin embargo, lo condenaron a tres años y medio de prisión en suspenso por amenazas.
Es decir, al ser condenado a prisión en suspenso, no deberá ir a la cárcel, sino que deberá cumplir con algunos requisitos como asistir al juzgado de vez en cuando y cumplir con tareas de una “libertad condicional”. Eso sí, en tanto, los abogados de la querella aseguraron no estar conformes con esta decisión confirmando que van a apelar la condena del cantante.
L-Gante escuchó el veredicto final
El veredicto fue leído por el juez Ignacio Racca, quien preside el tribunal de Mercedes, en una situación que en un principio se esperaba que lleve a que L-Gante reciba una condena de cumplimiento efectivo de hasta siete años de prisión, lo que impactaría profundamente su carrera.
No obstante, siempre existieron ciertos atenuantes que podía reducir la gravedad de la pena, como la falta de acusación formal contra Daniel Emanuel “Muelita” De Marco, amigo de Valenzuela y parte del grupo involucrado. Esta decisión del fiscal abría la posibilidad de que el veredicto para el cantante sea más leve, con una pena que no superaría los tres años en suspenso.
El incidente que originó el juicio involucra una acusación grave: según los denunciantes, L-Gante habría buscado a Torres, un empleado municipal de General Rodríguez, a raíz de un conflicto vecinal. La acusación indica que, tras un enfrentamiento, el cantante forzó a Torres a subir a su automóvil a punta de pistola y se lo llevó junto con Rosa Passi.
Estos testimonios resultaron determinantes en el proceso, aunque el defensor sostiene que L-Gante actuó para mediar en una situación de conflicto. Este lunes, la audiencia será crucial para definir el futuro judicial del artista, cuyo impacto en la escena de la Cumbia 420 ha sido enorme.
La decisión del juez determinará si este episodio marca un punto final en su carrera o si podrá seguir adelante sin restricciones legales. En cualquier caso, el fallo definirá si el polémico artista sigue en libertad o si enfrenta un periodo prolongado en prisión.