A pesar de las lluvias de las últimas horas, el viento y las altas temperaturas dificultaban las tareas de control, con lo cual las llamas continuaban avanzando.
El fuerte incremento del viento generó que el fuego se propague en la zona más activa, en la ladera noreste del Cerro Colorado, en dirección a los Lagos Martin y Steffen.
Por el momento, la estrategia de combate del incendio se centra en proteger a las poblaciones de Cascada los Alerces, las más cercanas al fuego que baja desde las laderas del Cerro Colorado.
En esa zona, los brigadistas lograron hacer una línea de defensa de aproximadamente 7 metros de ancho y 1,200 metros de largo, que se extiende desde el arroyo que baja de las Melisas hasta llegar al río Manso.
En esa zona, unas 48 personas, entre brigadistas de la Administración de Parques Nacionales, guardaparques, bomberos y pobladores, realizaron tareas de ataque directo con agua, se indicó a través de un comunicado del Comité de Emergencia, que es coordinado por el Parque Nacional Nahuel Huapi y la Dirección de Lucha Contra Incendios Forestales y Emergencias.
A su vez, otros 27 brigadistas fueron desplegados para hacer ataque directo con líneas de penetración y agua, afianzando otra línea de defensa que sube hacia la Piedra de Farol sobre la Casa de té.
En total, trabajan en el operativo 110 brigadistas en el terreno y otras 100 personas asisten en la emergencia en aspectos logísticos, junto al apoyo de agentes del Servicio Nacional de Manejo del Fuego y de los organismo de lucha contra incendios forestales de las provincias de Río Negro y Neuquén.
Por razones estrictas de seguridad, permanecía hoy cerrado el camino que va desde Los Rápidos al Circuito Cascada los Alerces y solo se permite la circulación de vehículos autorizados de instituciones oficiales.
En tanto, el acceso al circuito a Tronador permanece habilitado normalmente, según precisaron las autoridades.