En pleno proceso de conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Capital Humano, el conflicto entre la láctea SanCor Cooperativas Unidas Limitada (CUL), con sede en Sunchales, y la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra) sumó un nuevo capítulo: en un comunicado, el cuerpo de delegados habló de un supuesto vaciamiento de la firma, se refirió al estado de las plantas industriales y reflexionó: “En una empresa ruinosa, sin mantenimiento, ¿quién asegura la inocuidad de los productos?”
Según pudo saber este medio tras lo dicho por el cuerpo de delegados, la firma está trabajando normalmente, salvo de parte de algunos trabajadores y delegados que no aceptaron el proceso de conciliación. A este diario dejaron trascender que la inocuidad está “asegurada” y que la empresa está pagando lo que se comprometió en el marco de Capital Humano. Agregaron que todo lo que tenga que responder lo hará en la Secretaría de Trabajo de esa cartera.
“Las unidades industriales están devastadas y el panorama es desolador”, dijo el cuerpo de delegados de la cooperativa láctea. “Se están llevando todo y las instalaciones se encuentran en un estado de abandono total”, agregó.
“Como ya todas y todos los compañeros saben, SanCor viene tercerizando unidades de negocio, desguazando su actividad productiva y produciendo de esta manera un vaciamiento de empresa. Esta despreciable estrategia, no cierra sin despidos masivos y sin violentar todos nuestros derechos laborales”, alertaron los trabajadores.
Hace unos meses, se cayó una iniciativa de un grupo de empresarios para armar en torno de SanCor un fideicomiso de salvataje. La iniciativa tuvo serias dificultades e incluso objeciones técnicas de parte de la Comisión Nacional de Valores (CNV). Implicaba que algunas plantas se transferían a ese mecanismo. Algunos creen que el supuesto vaciamiento en rigor se evitó con la no concreción de ese fideicomiso.
“La situación es dramática y terminal. Los directivos de la empresa lo saben y planean la fuga. En tanto, siguen chupándonos la sangre hasta llevarse lo último que nos quede”, apuntaron los trabajadores firmantes del documento.
Para los firmantes, “los directivos, en lugar de regularizar la enorme masa salarial adeudada, violan el periodo conciliatorio utilizándolo para seguir vaciando la empresa y evadiendo al fisco”.
Añadieron que “durante la conciliación (obligatoria) no se pueden descontar haberes y (desde SanCor) lo están haciendo. (Por ello) La situación es terminal y sin salida. El ciclo de la empresa, como hasta hoy se conoce, concluyó”, indicó
Finalizaron con una dura advertencia: “No vamos a permitirá que 1400 familias queden en la calle. Buscaremos y encontraremos la forma legal para continuar con nuestra querida fuente de trabajo, al margen de estos delincuentes”.
Fuente: La Nación