El vicepresidente saliente de Estados Unidos, Mike Pence, condenó lo sucedido tras regresar al Congreso y les agradeció a quienes “se quedaron en su puesto para defenderlo”. “Para aquellos que causaron estragos en nuestro Capitolio hoy, ustedes no ganaron. La violencia nunca gana, y esta es la casa del pueblo”, sentenció.
WASHINGTON.- Varios edificios de oficinas del Congreso de Estados Unidos fueron evacuados este miércoles mientras partidarios del presidente Donald Trump asediaban el Capitolio y se enfrentaban con la policía, en protesta por la derrota electoral del mandatario. El Congreso, que había suspendido el debate del Colegio Electoral que debe certificar la victoria de Joe Biden luego de que manifestantes entraran al Capitolio y obligaran a su cierre, retomó la sesión minutos después de las 20 (hora EE.UU.)
Los integrantes del Senado y la Cámara de Representantes, que estaban analizando y debatiendo las objeciones de algunos legisladores republicanos a la victoria de Biden, se retiraron abrupta e inesperadamente del lugar. Los partidarios de Trump tiraron barricadas y se enfrentaron con la policía en los terrenos del Capitolio, y entraron al edificio.
Después de casi cuatro horas de enfrentamientos violentos, las autoridades declararon al complejo del Capitolio como “seguro” después de que la policía pusiera fin a la ocupación. A la par, comenzó el toque de queda dispuesto por autoridades y se dispersan los manifestantes que quedaban en los alrededores del Capitolio. Por otro lado, la vocera de la cámara de representantes, Nancy Pelosi, anunció que se preparan para reanudar la sesión y certificar la victoria de Biden.
Según testigos citados por Reuters, hubo manifestantes que golpearon las puertas de la sala de la Cámara de Representantes y que lograron ingresar al lugar.
“La policía nos ha pedido que saquemos las máscaras antigás porque se ha utilizado gas lacrimógeno en la rotonda”, dijo el demócrata de la Cámara de Representantes Jim Himes en Twitter.
Pence pidió un alto a la violencia, dijo que los involucrados en la violencia deben abandonar el Capitolio de inmediato y que serán procesados con “todo el peso de la ley”.
Ante los inéditos hechos de violencia en el Capitolio, sectores del Partido Demócrata y del Partido Republicano denunciaron un intento de golpe de Estado.
En un tuit, Trump llamó a sus partidarios a ser pacíficos y respetar a las fuerzas de seguridad.
La policía ordenó al personal abandonar el edificio Cannon y otras oficinas que flanquean el Capitolio después de que Trump pidiera a sus seguidores que se manifestaran en contra de la certificación de la victoria de Joe Biden en las elecciones del 3 de noviembre, que tiene lugar esta tarde en una sesión conjunta del Congreso.
“Acabo de evacuar mi oficina en Cannon”, dijo la legisladora republicana Nancy Mace en un tuit. “Ahora estábamos viendo a manifestantes agredir a la policía del Capitolio”. “Esto está mal. Esto no es lo que somos”, agregó.
Más temprano, Pence, había afirmado que no intervendría para detener la certificación en el Congreso de la victoria de Biden en las elecciones, desafiando los deseos del mandatario republicano Donald Trump.
“La Constitución me impide reclamar una autoridad unilateral para determinar qué votos electorales deben contarse y cuáles no”, afirmó Pence en un comunicado emitido cuando comenzaba la sesión conjunta del Congreso para certificar los resultados de las presidenciales, y poco después de que Trump le instara a hacer lo contrario desde un mitin en Washington.
Pence, quien preside el Senado, dijo compartir “la preocupación de millones de estadounidenses sobre la integridad de la elección”.
Más tarde, Trump lo acusó en un tuit de no tener “coraje” para “proteger a la Constitución” de Estados Unidos.