El italiano de 26 años se convirtió en el nuevo rey de la velocidad con una marca de 9.80 segundos. El estadounidense Kerley y el canadiense de Grasse completaron el podio. La prueba que se corrió por primera vez, en la modernidad, sin el jamaiquino Usain Bolt.
Los 100 metros masculino, quizás la prueba más importante y de más historia dentro del atletismo, tiene un nuevo rey y se llama Lamont Marcell Jacobs. El italiano de 26 años ganó la medalla dorada con un tiempo de 9.80 segundos y fue seguido por el estadounidense Fred Kerley y el canadiense Andre de Grasse, quienes hicieron marcas de 9.84 y 9.89 segundos respectivamente.
Esta fue la primera vez en la modernidad que se corrió la prueba de 100 metros masculino sin la presencia del jamaiquino Usain Bolt, dueño de las mejores marcas de la historia en esta disciplina. Lightning Bolt, tal como lo apodan, tiene el récord mundial con 9.58 segundos y el récord olímpico con 9.63 segundos.
Jacobs, nacido en Texas y de padre estadounidense y madre italiana, es el primer velocista de Italia en ser campeón olímpico, tras la consagración de Pietro Mennea en los 200 metros de Moscú 1980, hace ya 41 años.
Del puesto cuatro al siete de la final terminaron el sudafricano Akani Simbine (9.93), el estadounidense Ronnie Baker (9.95), el chino Su Bingtian (9.98) y el nigeriano Enoch Adegoke, que no finalizó por una lesión. El británico Zharnel Hughes fue descalificado por una partida en falso.