El Colón de Israel Damonte se prepara para jugar un partido clave por su permanencia en Primera División como será el que animará este domingo, desde las 14.30, ante Talleres de Córdoba, en el estadio Brigadier López, por la fecha 13 de la Zona A de la Copa de la Liga Profesional.
Israel Damonte brindó una conferencia de prensa, donde comenzó diciendo: “Es una semana donde tuvimos que trabajar en lo anímico más allá de lo que pasó ante Banfield, al grupo lo vi bien, estamos en un momento donde las derrotas pegan fuerte. Estamos tratando de buscar la tranquilidad y lo positivo, el equipo compitió y dejó todo, me gustó la actitud. Lamentablemente no pudimos quedarnos con nada, eso me duele mucho. Pero el equipo fue superior a Banfield, jugamos un poco nerviosos en el primer tiempo, abusando del juego directo, ya que tenemos jugadores para alternar eso. Wancho y Toledo son delanteros para buscarlos, pero no hay que abusar de eso, sino aprovechar los jugadores de bueno pie. Nos golpearon en el final del primer tiempo con un penalcito, más allá que hay un agarrón. Cuando estás jugando este tipo de cosas tienen que ser cuestiones claras, pero hubo un agarrón. Luego el equipo lo fue a buscar, lo empatamos y faltando 30 segundos nos convierten. Estábamos bien parados pero se dio algún error, pero no podemos volver atrás. A los jugadores le inculcamos que no se deben quedar con ganas de volver a jugarlo, ya que quiere decir que no diste todo. A veces cae un avión del cielo y se te mete en el ángulo, por eso hay que pasar ese umbral, una jugada te cambia todo. Estábamos con una gran felicidad y ahora estamos golpeados, pero tenemos ganas de afrontar y sacar adelante esto”.
Luego, Israel Damonte dijo: “Tuvimos la baja de Meza por lo cual tuvimos que acudir a un cambio, llegó muy justo, quiso jugar, estaba al 100%, pero le volvió a molestar y no pudo continuar, pero tal vez el mensaje para el hincha es que siga apoyando que lo necesitamos. En el primer partido fue impresionante, es un jugador más, un plus, por eso se hizo fuerte de local y le costó de visitante, hay que aprovecharlo. Pero no se le puede pedir nada al hincha de Colón, está haciendo su trabajo y lo necesitábamos. Los jugadores saben el momento que están atravesando, sería injusto que Colón no se quede en Primera. Hay que entregarse, es una forma de vivirlo. Mi forma de juego es competir al 100%, ya que muchas veces cuando no estás en una buena tarde a la hora de jugar lo podés sacar compitiendo, trabando y yendo para adelante. Pero no hay mucho tiempo, estamos al límite, quedan seis puntos y tenemos que aprovechar nuestra localía. Tenemos que jugar con el corazón en la mano e inteligencia, es a vida o muerte futbolística, nosotros tenemos que vivir. Hay otras cosas que llevan a la presión, como es que un padre no pueda darle de comer a sus hijos, estamos acostumbrados a esto, vamos a dejar el corazón, el hincha que se quede tranquilo. Saldremos a cortarle las patas a Talleres”.
“No me gusta hablar mal del rival (por Banfield), sí tuvimos errores que lleva a que el rival pueda sacar una ventaja, en el segundo tiempo Colón superó a Banfield, ellos tuvieron una contra que saca el Flaco Conti. A veces esas jugadas cambian, no es lo mismo empezar perdiendo que ganando. Pero me gustó cómo competimos, hay que tratar de achicar el margen de error, pero no hay tiempo, necesitamos un plus de los jugadores. También puede ser que uno falle eligiendo a uno o a otro. Cuando llegué quise renovar, poner a gente fresca, cambiar las energías, por eso los cambios frente a Atlético Tucumán. En el primer partido salió, en el segundo estuvimos cerca de traernos algo, tenemos algunas bajas como es lo de Meza, Batallini, Espínola, jugadores que fueron importantes durante el año, pero tengo a un plantel con muchas ganas. Queremos dejar los tres puntos en casa para llegar con vida a la última fecha”, desarrolló Israel Damonte.
“Veremos, utilizo esquemas en función a nuestros jugadores, a veces no teniendo jugadores en alguna posición lo hace más complicado. Probé ante Tucumán a Pierotti, en algunos lugares escuché que dijeron que lo puse de cuatro, pero no jugó ahí, jugó de lateral-volante. A Toledo no podés ponerlo de cinco o de dos, pero hay muchas veces que hay jugadores que deben marcar, atacar, y Pierotti puede hacer las dos cosas”, agregó Israel Damonte de cara al partido ante Talleres.
Y sobre Talleres, rival de Colón el próximo domingo, Israel Damonte opinó: “Trabajamos en función de lo que venga a proponer Talleres, a veces pasa lo que uno cree y otras no, y tenés que resolver en cancha. Con el plantel que tenemos da la posibilidad de cambiar el sistema, quisimos ganar estabilidad con la línea de cinco, lo hicimos bastante bien. En el segundo tiempo ante Banfield tuvimos que cambiar y sufrimos un poco más. Talleres tiene jerarquía y velocidad, tenemos que tratar de resolver eso, sabemos su potencial, sabiendo que tenemos que ir a buscarlo porque necesitamos los tres puntos”.
En cuanto a Rubén Botta, Damonte dijo: “No quiero que marque, solo que se posicione. Es un jugador de mucha jeraquía, hasta cuando jugaba de mediapunta se posicionaba por la izquierda, su posición es casi igual. En el fútbol de hoy necesitás un posicionamiento defensivo para obstaculizar una línea de pase. Nosotros necesitamos que en el 0-0 Colón busque como lo hizo en el segundo tiempo ante Banfield, más allá del esquema.
Luego, en cuanto al temperamento de los jugadores que elige en Colón, Damonte dijo: “Mucho, porque realmente lo dije al principio, tenemos muy pocos días de trabajo, y tratamos de dar desde lo táctico un posicionamiento, desde lo defensivo es más fácil, desde lo ofensivo hay que dejarlo ser. Contra River lo buscaron mucho a Wanchope, funcionó el juego directo, nos puede dar cosas, más allá que hoy está medio mal visto. El temperamento para mí es fundamental, es mi forma de vivir el fútbol, hice mi carrera así. No tengo otra forma de hacerlo, hay jugadores que con más calidad lo pueden resolver, y otros que tienen el corazón”.
Se le preguntó también por lo que espera de Talleres, y dijo: “Tiene un gran equipo, tiene calidad, un entrenador que hace mucho tiempo que viene trabajando, compite, hizo un gran partido ante Vélez, lo podría haber ganado. Trataremos de llevarlos a un lugar donde nos convenga, de ganar duelos, de lastimarlos, hay veces que ataca de más, con laterales abiertos, y lo podemos aprovechar con jugadores rápidos y precisos. Puede contragolpear bien, tenemos que estar atentos a las pérdidas y cortar las contras, porque te pueden lastimar”.
“Estoy viviendo día a día, no tengo tiempo para pensar en Vélez, ojalá el domingo a las 5 de la tarde nos encuentre con felicidad de haber hecho nuestro trabajo, luego hay situaciones que no puedo hacer nada con los resultados de los rivales, los árbitros. Sufrís siempre, tratamos de gastar las energías en lo nuestro. Queremos sacar adelante el partido ante Talleres, luego veremos cómo preparamos el partido ante Vélez”, agregó sobre lo que se vendrá para Colón, en la última fecha de la Liga Profesional.
En cuanto al rol de los referentes, contó: “Me encontré con un grupo espectacular, muy comprometido con la causa y el momento. A Polo (Goltz) le tocó no estar, que es un referente, y era el primero empujando, hablando… Así todos, llegar y y que los jugadores grandes te digan que haga lo que sienta, es muy bueno, eso no pasa en todos lados, menos con los jugadores jóvenes, hay algunos que se te animan. Hay predisposición al 100%, eso me da tranquilidad para tomar decisiones, es mejor tomarlas de esa forma”.
Y sobre la actualidad de Tomás Galván, quien podría ser titular en Colón ante Talleres, Damonte indicó: “Tuve una charla con Tomi, hay veces que el sistema le da chances a algunos jugadores y otros no. Pero optamos por Perlaza, y por afuera en una línea de cinco lo llevás a un lugar incómodo, lo tengo muy en cuenta, hizo una gran semana. A la hora de armar el equipo a veces se complica. Pero no tengo un conocimiento del último mes. A veces las posibilidades son 20 minutos. Es un chico que nos puede dar mucho y veremos si le podemos dar minutos”.
Fuente: Diario Uno