El «Tucu» José Matías Ruiz pasó de ser un ignoto narco santafesino a captar la atención de «Guille» Cantero, el líder de la banda rosarina Los Monos que, desde la cárcel, continúa manejando el millonario negocio que sembró de droga y muerte la Cuna de la Bandera.
Una investigación judicial que comenzó por una denuncia anónima en la provincia de Buenos Aires decantó en una minuciosa labor de inteligencia dirigida por el fiscal federal Nº 2 de Santa Fe, Walter Rodríguez, quien este lunes requirió la elevación a juicio de una nueva causa contra José Matías Ruiz, alias el «Tucu» y Stefanía Andrea Peñaloza. La pareja está acusada por la tenencia de 107 gramos de cocaína y por el hallazgo en su poder de una pistola 9 mm, la cual habría sido utilizada para cometer crímenes en Rosario.
Una escucha telefónica del 21 de noviembre del año pasado, aporta un dato revelador. Ruíz habla con un tal «Héctor» al que le confiesa que le habían ofrecido que pilotee todos los sicarios de Los Monos.
«Cuando salí no tenía ni un peso», dice el «Tucu». Pero «ahora se pelean por darme una mano» (…) «me dieron para que pilotee todos los sicarios de los monos bolo» pero «mi mujer no quiso que me meta».
«Guille Cantero controlá tus gatos» decía un cartel hallado en septiembre de 2022 en Rosario, delante de un edificio baleado.»Guille Cantero controlá tus gatos» decía un cartel hallado en septiembre de 2022 en Rosario, delante de un edificio baleado.
«Corte mafia»
Entonces Ruíz explica que «quieren un vago grande que no se drogue», porque «los wachos están haciendo cualquiera en Rosario», pero «no quise saber nada» (…) «prefiero estar así medio con lo justo», sopesa. Y después cuenta: «Yo estuve ahí en Rosario en ese mambo viste, pero quieren… que se yo, como que quieren meter corte mafia a todos los penales».
Más de un año le llevó a la Justicia desentrañar la trama delictiva, cuya denuncia primigenia se realizó el 9 de julio de 2021, bajo la modalidad de identidad reservada y ante el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N° 3 de Morón.
El dato era que «Ariel Máximo Cantero, apodado «Guille» o «Guille Cantero» -por entonces alojado en el Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz-, comercializaba cocaína proveniente de la ciudad de Rosario», según consta en el documento judicial.
Allí empieza a tallar la figura del «Tucu» Ruiz, detenido en el mismo establecimiento penitenciario. El santafesino fue señalado como «la persona encargada de buscar estupefacientes en Rosario -provisto por Cantero- para luego distribuirlos en la provincia de San Juan y en distintos puntos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, aprovechándose de las salidas transitorias».
Los investigadores creen que «Guille» Cantero reclutó al «Tucu» Ruiz en su estadía en Marcos Paz, en 2021.Los investigadores creen que «Guille» Cantero reclutó al «Tucu» Ruiz en su estadía en Marcos Paz, en 2021.
«Naturaleza delictiva»
Ruíz cumplía una condena de 4 años de prisión en Marcos Paz por «tenencia de estupefacientes con fines de comercialización», dictada el 12 de marzo de 2021 por el Tribunal Oral Federal de Santa Fe.
Y si bien la sanción vence el 5 de diciembre de este año, el 21 de abril de 2022 se incorporó al régimen de salidas transitorias, hasta que el 6 de octubre recibió la tan ansiada «libertad asistida» para la cual debía fijar domicilio, conseguir trabajo y hacer una vida alejada del delito.
«Sin embargo, hizo casi todo lo contrario», dice el fiscal Rodríguez en el requerimiento. «Ruíz no sólo construyó lazos de naturaleza delictiva con personas integrantes del agrupamiento conocido como la ‘banda de Los Monos’, sino que llevó a cabo una serie de acontecimientos de la misma naturaleza de aquellos que justificaron la imposición de una sanción penal».
«Me la dan Los Monos»
La Fiscalía transcribe en su pedido de elevación a juicio extractos de escuchas que no resisten el mínimo análisis. Drogas, armas, amenazas y muertes violentas, pero también negocios con autos de los denominados «mellizos», aparecen en el inventario de la pareja Ruiz-Peñaloza.
Dos semanas después de pisar la calle surge la primera evidencia del accionar criminal. La labor investigativa estuvo a cargo del Departamento de Inteligencia contra el Crimen Organizado de la Policía Federal Argentina (PFA) que se dedicó en forma exclusiva a las intervenciones telefónicas.
El 21 de octubre de 2022 Ruíz mantuvo una charla por la venta de una consola a un preso, al que le propuso pagarle una parte en pesos y otra con «un poco de porquería». «A mi me la dan Los Monos», se jactaba.
Cocaína en la casa
Dos meses después de que le dieran la «asistida» la fiscalía pidió allanar a la pareja en el barrio 29 de Abril de Santa Fe. El procedimiento se hizo el 8 de diciembre del año pasado, en una casa de calle Saavedra al 8500 (manzana 4, casa 11), donde secuestraron 23 envoltorios con clorhidrato de cocaína y dos «piedras» con la misma sustancia -con un pesaje total de 107 gramos-; además de una pistola semiautomática 9 mm con la numeración limada.
Por esto último el fiscal Rodríguez solicitó la elevación a juicio para Ruiz y Peñaloza, por la coautoría en la «tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, en concurso real con el delito de tenencia ilegal de arma de guerra de uso civil condicional».
Además, solicitó una serie de medidas para profundizar la investigación, en lo que refiere a los vínculos entre el negocio de la droga y los crímenes en la ciudad de Rosario, y por el presunto lavado de dinero de origen ilícito, materializado principalmente en la compra venta de autos.
Fuente: El Litoral