La Vice pide acciones puntuales al Presidente para resolver las fisuras internas en la coalición gobernante. Para el mandatario, el plan es “ofensivo y delirante”.
La interna del Gobierno está determinada por la tensión en la relación entre el presidente Alberto Fernández y su vice Cristina Kirchner. La situación resultó más expuesta durante los homenajes a 40 años de la Guerra de Malvinas, en los que no compartieron actos ni se mostraron juntos.
La exmandataria exige acciones puntuales para recomponer la relación, entre ellas, que se vaya Martín Guzmán.
Como el 24 de marzo pasado, otra fecha conmemorativa volvió a exponer la interna del Frente de Todos, que ya nadie se preocupa por ocultar. El sábado, Alberto Fernández y Cristina Kirchner encabezaron actos separados por el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas, en el 40° aniversario del inicio del conflicto.
Tampoco participó de ningún acto relacionado con la llegada del presidente chileno Gabriel Boric, con quien se firman acuerdos en el marco de la primera visita de Estado del mandatario trasandino a la Argentina.
El conflicto, que se intensificó con el acuerdo al que llegó el Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para el pago de la deuda, no parece tener solución en el corto plazo.
Sin embargo, hay varios puntos que la vicepresidenta dejó claros como condiciones para recomponer el vínculo dañado con Fernández. En primer lugar, pretende una “capitulación” política del Presidente, una “rendición”.
Exige, por otra parte, que eche a los ministros más cercanos a él, y también los de mayor poder de decisión en cuanto a las políticas económicas del país. Se trata del titular de Economía Martín Guzmán, el ministro de Producción Matías Kulfas y el titular de la cartera de Trabajo y Previsión de la Nación Claudio Moroni. Precisamente los tres mantendrán este martes una reunión con el Consejo de Precios y Salarios.
Además, pretende que se replantee el acuerdo con el Fondo en mayo, cuando se reevalúe cómo está funcionando lo pactado.
El último punto tiene que ver con el futuro de la coalición, de cara a las elecciones 2023: Cristina Kirchner quiere que el Jefe de Estado renuncie a una nueva postulación para presidente.
Fernández se muestra lejos de tomar en cuenta estas solicitudes e incluso calificó de “ofensivo y delirante” el plan de la vicepresidenta.