Activistas feministas exigieron la destitución del juez que desestimó la prisión preventiva de un imputado por abuso sexual con acceso carnal «porque usó preservativo». El hombre seguirá en libertad hasta que el juez Gentile Bersano resuelva.
Esta tarde fue la audiencia de apelación a la resolución del juez Rodolfo Mingarini donde el juez de segunda instancia Fernando Gentile Bersano escuchó los argumentos de la fiscalía, que pidió la nulidad, y de la defensa, que rechazó el pedido. Afuera de los Tribunales, un centenar de activistas feministas reclamaron desde las 16 en las puertas de la Casa de la Justicia para reclamar la «destitución ya» de Mingarini.
La apelación terminó cerca de las 18, sin resultado. Gentile Bersano informó a las partes que la resolución y los argumentos de la misma iban a ser enviados por las vías correspondientes. Lo más probable es que se sepa luego de la feria judicial si el imputado por abuso sexual con acceso carnal identificado como L.E.S sigue con medidas restrictivas o va a prisión preventiva.
Para el final de la audiencia de este lunes, quedaron una veintena de activistas de la Mesa Ni Una Menos en la puerta de Tribunales a la espera de información de UNO Santa Fe sobre cómo se desarrolló el proceso judicial. Al mismo tiempo, el ministro de la Corte Suprema de Justicia, Rafael Gutiérrez, de la provincia bajó de su auto recién estacionado y se quedó unos minutos a escuchar los reclamos y conversar.
Los carteles y las palabras de las militantes sostenían lo mismo: «Queremos la destitución ya de Rodolfo Mingarini como juez». Con las manos, Gutiérrez pidió paciencia y respondió «va todo encaminado, no se preocupen». Al reiterar los reclamos de «destitución ya», repitió «va todo encaminado» y les aseguró que no está tranquilo con el tema.
Al margen del escepticismo expresado por el colectivo feminista a las palabras del ministro al retirarse, fuentes judiciales y legislativas diversas indicaron que habrá que esperar a que pase la feria judicial. Allí se comenzaría a aclarar el panorama que empiece a definir si el destino de Mingarini es una posible destitución, o una menos probable desestimación.
Un centenar de activistas feministas de la Mesa Ni Una Menos reclamó esta tarde la destitución del juez Rodolfo Mingarini.
Un centenar de activistas feministas de la Mesa Ni Una Menos reclamó esta tarde la destitución del juez Rodolfo Mingarini.
Mingarini pasó a estar bajo la lupa luego que UNO diera a conocer el 3 de junio la resolución que tomó en la audiencia del 30 de mayo. La Procuración en ese momento anunció que inició una investigación y que se analizan varios fallos de este juez como contexto, especialmente la polémica audiencia y otra resolución que hizo sobre un caso de violencia de género ocurrido el 2020 en Santo Tomé. Ambos casos fueron dados a conocer en detalle por este medio.
Hay altas expectativas sobre lo que se defina en esta audiencia de apelación de este lunes porque puede variar la balanza en el inicio y desarrollo de un posible proceso de juicio político. No por el resultado en sí, es decir si se le otorga o no la prisión preventiva al imputado, sino por los argumentos que se usen para tomar la decisión. Si Gentile Bersano coincide en la teoría del profiláctico como símbolo de consentimiento, en términos burocráticos podría hacer más dificultoso el camino hacia el jury.
Mingarini
El 30 de mayo Mingarini le otorgó la libertad con restricciones a un imputado por abuso sexual con acceso carnal bajo el argumento que no entendía cómo el hombre tuvo tiempo de ponerse un preservativo al momento del ataque y porque durante el tiempo que no había estado detenido no atacó a la mujer «siendo que vive sola». Las declaraciones despertaron varias reacciones. Por un lado, la Corte Suprema de Justicia dispuso que el magistrado Alejandro Tizón investigue la actuación de Mingarini. Ese proceso judicial duró casi tres semanas y el resultado fue un pedido de sumario administrativo, que está en curso de ser analizado. En pocas palabras, no fue desestimado. Por otro lado, la Procuración también lo investiga.
Otras de las reacciones destacadas dentro de la política provincial, fue la denuncia colectiva de 20 legisladoras de casi todos los bloques de la Cámara de Diputados en la Procuración General de Santa Fe para que se investigue y haya una aplicación de sanciones correspondientes a Mingarini. A partir de este caso, las legisladoras se encontraron con varios obstáculos, como la aplicación de la actual Ley Provincial 7050 de enjuiciamiento a jueces. Se presentó un proyecto de ley para modificarlo e incluir la paridad de género en esos tribunales, entre otras cláusulas como la de secreto absoluto y obligado si un juez es denunciado por la Procuración.
Hoy un tribunal de enjuiciamiento consiste en una mayoría casi absoluta de miembros varones. La conformación está compuesta por la Corte Suprema de Justicia de la Provincia (hay una sola mujer, de seis puestos ministeriales), un senador, un diputado y dos abogados matriculados que son sorteados entre titulares del colegio de esa profesión de las jurisdicciones de Santa Fe y de Rosario. Los miembros legislativos son designados de manera bianual por ambas Cámaras. Hoy son el diputado Maximiliano Pullaro y el senador Armando Traferri. El jueves pasado se presentó el proyecto para lograr la paridad en la conformación del tribunal de enjuiciamiento a jueces.
Según la Ley 7050, las causas de remoción de los jueces son: ignorancia manifiesta del Derecho o carencia de alguna otra aptitud esencial para el ejercicio de la función judicial, reiteradamente demostrada; incumplimiento reiterado de las obligaciones del cargo impuestas por la Constitución, leyes o reglamentos, acordadas o resoluciones judiciales, o infracción de sus normas prohibitivas; desorden de conducta privada o actividad privada incompatible con el decoro y dignidad de la función judicial; comisión u omisión de actos previstos por las leyes como delitos dolosos; e inhabilidad física o mental permanente que obste al ejercicio adecuado del cargo.