El gobernador de Jujuy se mostró autocrítico con los cuatro años de gestión de Cambiemos, afirmó que no tuvieron “el mejor equipo de los últimos 50 años” y manifestó su deseo de ser candidato en 2023
En una entrevista radial, Gerardo Morales se mostró muy autocrítico con respecto a la gestión que Cambiemos (hoy Juntos por el Cambio) llevó adelante entre 2015 y 2019 y afirmó que no avalaría otra postulación de Mauricio Macri para Presidente. Asimismo, deseo que las elecciones de 2023 tengan a un referente de la Unión Cívica Radical compitiendo en las urnas.
“No apoyaría a Macri en una posible nueva candidatura a Presidente. Soy autocrítico de las cosas que hicimos mal. No tuvimos el mejor equipo de los últimos 50 años”, afirmó el gobernador de Jujuy en diálogo con radio Rivadavia.
“Yo prefiero más política y a Juntos por el Cambio como una fuerza donde el radicalismo tenga un rol mucho más importante en la toma de decisiones”, expresó Morales. Y deseó: “Yo quiero un presidente del radicalismo y quiero ser candidato”.
Más allá de su intención de que un integrante de la UCR sea el próximo mandatario nacional, sostuvo que respeta mucho a Patricia Bullrich, quien le dijo que va a ser candidata en 2023, y que Horacio Rodríguez Larreta no es su candidato, sino que “es el candidato del PRO”. “Las internas partidarias y el debate vienen bien”, completó con respecto a su idea de que Juntos por el Cambio “no llegue” a los comicios presidenciales con un solo candidato.
Por otra parte, el gobernador jujeño aseguró que “no puede quejarse” de la gestión del actual Gobierno nacional durante la pandemia de coronavirus.
Las declaraciones de Morales se dieron en el marco de las elecciones internas de la UCR bonaerense, que se realizan este domingo: el senador Martín Lousteau apoya al intendente de San Isidro, Gustavo Posse, mientras que el mandatario de Jujuy se mostró a favor de Maximiliano Abad.
Al respecto, Morales aseguró: “Gustavo Posse estaba en el PRO en el 2015, era más amarillo que Macri”. Además, sostuvo que el intendente de San Isidro pasó por el radicalismo kirchnerista y que “los que nos quedamos a defender los intereses del partido fuimos (Alfredo) Cornejo, (Mario) Negri y yo, Posse no estaba”.
Asimismo, la negativa a apoyar nuevamente a Macri llegó tres días después de que el ex Presidente presentara su libro en tono de campaña política frente a más de 700 personas. En una pequeña introducción previa a que comience la conversación con Pablo Avelluto, ex ministro de Cultura que lo ayudó en la redacción de las memorias, Macri envió un mensaje a la tropa de Juntos por el Cambio: “Somos el cambio o no somos nada, ese es nuestro motor”.
Y agregó: “Nosotros somos los que representamos a millones que tienen la convicción de que pueden ser mejores y aceptan el desafío de superarse. Ser el cambio significa trabajar en equipo, gestionar y siempre pensar para qué estamos acá”.
En sintonía con esto, Macri afirmó: “Sé que es un momento en que estamos focalizados en defender la república y las libertades. Busco que el aporte vaya a reivindicar esos dos pilares por lo que estamos acá: para ayudar a que la gente viva mejor, y el como que es aceptando desafiar al status quo”.
El ex jefe de Gobierno había comenzado con una chicana al kirchnerismo: “Este es mi primer libro, pero estoy pensando en una zaga, entre tiempo, segundo tiempo, alargue, penales. Es que el kirchnerismo me hace tanta publicidad de mi libro que voy a hacer más”.