El Presidente encabezó un homenaje a los desaparecidos en la exESMA y aprovechó para cuestionar a varios dirigentes opositores. “Tiemblan cuando les hablan de igualdad”, dijo.
A cuatro días del 45° aniversario del último golpe de Estado, el presidente Alberto Fernández participó este sábado del acto de cierre de un homenaje a trabajadores detenidos-desaparecidos en la ex ESMA y aprovechó para cargar en duros términos contra la oposición.
“Van a decir que este discurso es un discurso que genera grieta; lamentablemente es solo un discurso descriptivo”, dijo para adelantarse a futuras críticas.
Segundos después cuestionó, sin nombrarla, a la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, quien este viernes pidió que “cada sector de la salud” pueda comprar sus propias vacunas.
El tuit de Patricia Bullrich que eligió responder el Presidente (Foto: Twitter/ patobullrich)
“Los que estamos aquí queremos las vacunas para todos y todas, queremos que todos puedan vacunarse. En la fila de ellos, que compren las vacunas los que tienen plata. Y si tienen plata que las compren cuando quieran y que las den cuando quieran y el resto que espere. En verdad la enfermedad no espera a nadie, ataca a todos, y por lo tanto la vacuna tiene que llegar cuanto antes a todos. Pero en esa frase, en esa idea, está la cultura del descarte: el que pueda pagársela que se la pague, eso es lo que dicen”, criticó.
“Me solidarizo con cada agravio que sufre cada uno de nosotros de parte de los republicanos, que nos atacan y nos agravian. Yo nunca le pido a la sociedad argentina que me tolere por lo que pienso, siempre le pido que me respeten, que nos respetemos. Porque tolerar es lo más parecido a soportar algo que a uno le disgusta. Y a mí nadie debe soportarme como yo no debo soportar a nadie; solo debo respetar al otro”, indicó.
El acto del Presidente junto a sindicalistas y organismos de DDHH fue en la exESMA (Foto: Captura de TV)
Un acto de fuerte contenido político
El nombre del acto fue “Homenaje a Trabajadorxs Detenidxs Desaparecidxs: Los 30.000 son parte del movimiento obrero”. Sobre el banner oficial, se ven los logos de HIJOS, de Presidencia de la Nación y de la corriente intersindical por los Derechos Humanos de la CTA y la CGT. “Me pareció importante que la dirigencia sindical se haga parte de los actos conmemorativos por el 24 de marzo. Ese día empezó la mayor tragedia social que no debemos olvidar nunca, nunca”, remarcó el Presidente.
“El 24 de marzo se produjo un quiebre moral en la condición democrática argentina que nunca debemos olvidar y nunca debemos dejar de repudiar. Olvidar eso es un pecado que como sociedad no nos podemos permitir”, subrayó.
“Lo que los dictadores de entonces no toleraban una sociedad de iguales, el derecho de huelga, el reclamo de la juventud. Siento ser parte de un movimiento político que objetivamente amplió derechos en distintos momentos de su historia y estoy convencido de que los argentinos nos volvimos una mejor sociedad cada vez que ampliamos derechos”, agregó el Presidente. “El debate que vivimos es el que dice: paren de dar derechos. Porque en el fondo la discusión tiene que ver con lo que el Papa propone a su modo cuando critica al capitalismo y habla de la cultura del descarte, cierta sociedad que dice: ´El problema que tenemos es que nos sobran argentinos y argentinas. Entonces, a esos argentinos y argentinas mandémosles al margen y vivamos los que podemos vivir. ¿Y quiénes son? Los que yo decido´. Y esa cultura lucha con los que decimos que este es un país donde viven 45 millones de personas y todos tienen derecho a crecer y desarrollarse en condiciones dignas. Todos. No algunos, todos. Y cuando decimos todos la piel de gallina se les pone a ellos, porque tienen pánico de que tengamos derechos. Tiemblan ante la posibilidad de que la Argentina sea más igualitaria”, lanzó.
Antes del Presidente, hicieron uso de la palabra referentes sindicales y de las organizaciones de derechos humanos, que expresaron su apoyo al gobierno nacional y cuestionaron a la oposición.
“A partir del golpe, la imposición del terrorismo de Estado fue la práctica sistemática para intentar someter al pueblo argentino”, indicó Héctor Daer, secretario general de la CGT. “La mayoría de los desaparecidos fueron dirigentes sindicales y en democracia hubo gobiernos que persiguieron también a dirigentes sindicales”, consideró. Daer también le ofreció “un desagravio sincero” a Estela de Carlotto porque “la intolerancia macabra es imposible que vuelva a golpear las puertas de la Argentina: la democracia y la tolerancia deben ser ejes que defendamos permanentemente”. Lo hizo en referencia a las bolsas mortuorias que aparecieron con su nombre semanas atrás frente a la Casa Rosada y a las pedradas contra el presidente Fernández en Chubut.
“Me di el gusto de abrazar al querido presidente, qué virtual, presencialmente. Era hora ya”, afirmó la integrante de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, Taty Almeida, de 90 años. En su discurso, la referente de derechos humanos cuestionó los cuatro años del macrismo, a los que calificó de tierra arrasada. “Van a seguir mostrando su odio. Ese deplorable acto que hicieron en la Plaza de Mayo, tremendo, Dios mío, con esos bolsones. Y apoyados por un ex presidente que fue elegido democráticamente y por ese grupito de Jóvenes Republicanos, que si uno ve los apellidos que tienen se da cuenta por qué han procedido así. Pero contra eso tenemos una juventud maravillosa”, expresó. “Jamás vamos a permitir que nadie tire abajo a un gobierno nacional y popular, así que no bajen los brazos”, agregó.
“Las víctimas del lawfare se merecen estar el 24 de marzo al lado nuestro. No aflojemos, hay un gobierno que vino para modificar al país. Alberto, contá con el movimiento obrero para hacer lo que haya que hacer y seguir conquistando derechos”, dijo Daniel Catalano, secretario general de ATE Capital.
De la ceremonia participan integrantes de distintos organismos de derechos humanos como Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo (que asiste por Zoom); y Taty Almeida, integrante de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, junto a dirigentes sindicalistas como Catalano, de la CTA, y Sergio Palazzo y Héctor Daer, de la CGT. El secretario general de la CTA y diputado nacional del Frente de Todos, Hugo Yasky, no está presente porque se encuentra aislado por haber tenido un contacto estrecho con alguien que tiene coronavirus, según indicó el militante de HIJOS Charly Pisoni.
También estuvieron presentes algunas figuras del gabinete nacional, como el ministro de Educación, Nicolás Trotta, el jefe de gabinete, Santiago Cafiero y el secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla. Otros presentes fueron el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal y titular del Grupo Octubre, Víctor Santa María, la gerenta general de Contenidos Públicos S.E., Jésica Tritten; y las ex legisladoras porteñas María José Lubertino y Gabriela Alegre, actual directora nacional de Formación de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.